Seguimos a vueltas con el posible sistema de suspensión “activa” que todos creen que tienen los Red Bull. Como ya dijimos, las últimas especulaciones hacen referencia a un posible sistema que podría ser recargado mediante gas comprimido tras la sesión de calificación. La normativa no permite cambiar el set-up del coche tras la calificación, pero si permite drenas o añadir gases comprimidos a los coches. Hueco en el reglamento o artimaña.
Tantas habladurías hizo que primero, la FIA analizara el RB6 durante el pasado Gran Premio de Malasia, recibiendo el OK del máximo organismo y segundo que la FIA se haya puesto seria. No quieren ni oir hablar de la existencia de sistemas de control de altura en los monoplazas. Cualquier procedimiento, método o mecanismo que varie el set-up de las suspensiones será declarado ilegal. Si algo produjera algún cambio en la suspensión tras la calificación del sábado contravendrá el artículo 34.5 del reglamento deportivo.
Para más señas, el artículo en cuestión explica que si un participante modifica cualquier parte del vehículo y realiza cambios en el set-up del coche durante su estancia en el parque cerrado, el piloto deberá salir desde el pit lane. Aunque es de suponer que de existir un sistema, como se dice de Red Bull, la sanción iría más allá, ya que el reglamento deportivo se ciñe a los ajustes que se pudieran realizar.
Así que, de existir un sistema basado en algún gas comprimido, éste sería ilegal. Y si la FIA no ha encontrado nada en el RB6...o no saben donde buscar, o está muy bien escondido o realmente el secreto de Red Bull no está en esa “masa”. Vamos que tenemos lío para rato.
Vía | Autosport