Salía desde la séptima plaza, su mejor resultado en unos entrenamientos clasificatorios de Fórmula 1. Lo tenía todo de cara, pero al final el resultado no ha sido el deseado. El Toro Rosso no ha funcionado, el coche no era rápido, y al final Jaime Alguersuari se ha visto obligado a abandonar por una rueda mal apretada en su primera (y última) parada en boxes.
Después de la salida se ha visto ya muy claro que hoy no era el día para obtener un buen resultado, a pesar de que una séptima posición hacía presagiar puntos, por lo menos. Inmediatamente, Alguersuari bajó a la novena posición, y en pocas vueltas era ya décimo, y seguía perdiendo tiempo y posiciones, hasta que Sébastien Buemi le ha alcanzado.
En ese momento, los dos pilotos de Toro Rosso, conscientes de lo que se están jugando entre ellos, han tenido un momento de lucha, del que ha salido victorioso Alguersuari. En ese momento paraba en boxes Nico Rosberg, y en Toro Rosso han sabido jugar sus cartas y han parado en boxes, en lo que era una buena jugada estratégica.
Pero las buenas jugadas estratégicas no sirven de nada si las ruedas no están bien puestas. La rueda de Jaime Alguersuari se ha soltado en la primera curva, y el catalán ha tenido que abandonar, terminando así una carrera que a priori tenía muchas posibilidades de ser muy importante para él. Sin duda, en Toro Rosso no pueden estar contentos, puesto que hoy han perdido una oportunidad de oro.
El monoplaza no funciona como debería, y eso es algo que tienen que remediar en las tres semanas que nos separan del Gran Premio de Turquía. Siempre dicen que la primera carrera en Europa muestra lo que será la realidad de la temporada. No tengo ninguna duda de que este año también será así.
En Motorpasión F1 | Gran Premio China Fórmula 1
