El Gran Premio de Abu Dabi de Fórmula 1 ha servido para poner punto y final a la temporada 2020, pero también ha puesto sobre el tapete un debate interesante sobre si los coches actuales de Fórmula 1 son los más rápidos de la historia, tal y como parece. Fernando Alonso y su Renault R25 tienen algo que alegar.
La Fórmula 1 híbrida tiene los récords de prácticamente todos los circuitos del mundial. Los bate año tras año y rueda mucho más rápido de los tiempos que se marcaron en 2004 y 2005, los últimos años de los V10. Sin embargo, Alonso puso neumáticos lisos en su Renault R25 para la exhibición de Yas Marina y sus tiempos no fueron nada despreciables.
Alonso se quedó a 4 segundos de la pole con un coche de museo
Aunque no hubo cronometraje oficial a las vueltas de Alonso, siguiendo la señal de televisión es fácil atisbar que el asturiano llegó a rodar en 1:39 en Yas Marina. Además, así lo han filtrado desde el equipo Renault y también desde el propio entorno del piloto asturiano. Un tiempo más que digno que le hubiese dejado prácticamente a la altura de los últimos clasificados en parrilla.
Nicholas Latifi, piloto de Williams, marcó el peor tiempo de la clasificación del Gran Premio con un 1:38.443. Todo esto teniendo en cuenta que lo de Alonso fue una mera exhibición en la que el coche se sacó del museo unos días antes, se desempolvó y se le sacó a pista. Y, por supuesto, destrozar esa joya atacando los pianos hubiese sido un pecado.
La Fórmula 1 no corría en Abu Dabi en 2005, por lo que hacer la comparación directa de los tiempos en competición es imposible. Pero en otros trazados, como Monza, la diferencia entre la pole de Lewis Hamilton en 2020 y la de Kimi Raikkonen en 2005 es de dos segundos en favor del británico. En un circuito revirado como Hungaroring la vente de 2020 crece hasta los seis segundos.
Llegados a este punto, hay que recordar que los coches de 2005 no tenían neumáticos lisos, sino que incluso las gomas de seco eran estriadas. Además, las ruedas actuales son mucho más anchas, tanto las delanteras como las traseras. Todo eso se traduce en una ventaja dramática en paso por curva y aceleración en favor de los monoplazas actuales sin que sea puramente mérito del coche.
Alonso montó en su Renault R25 los neumáticos actuales de la Fórmula 1, dando la curiosa imagen de ver el logo de Michelin en el morro y el de Pirelli en la rueda. Más allá de esta curiosidad, la mejora en el R25 ya se notó: Alonso se quedó a tan solo cuatro segundos del tiempo que le valió la pole a Max Verstappen.
¡Qué gozada volver a ver a Fernando Alonso sobre el R25!
— F1 en Movistar+ (@movistar_F1) December 13, 2020
¡Qué recuerdos! ¡Qué ganas! #ABUmovistarF1 pic.twitter.com/qtZlCX3bdb
Puede parecer un mundo, pero es una auténtica minucia. Con un coche sin ningún tipo de reglajes ni puesta a punto, recién sacado del museo y con un piloto que lleva un tiempo sin correr y no forzó demasiado porque no podía romper el coche en un piano, ya no digamos en un accidente, Alonso se quedó solo a cuatro segundos.
A esto hay que añadir que, lógicamente, aquel Renault R25 no estaba diseñado para neumáticos ni lisos ni tan anchos. Lo comprobó el propio Alonso, que tuvo un subviraje masivo, especialmente cuando montó el compuesto blando. De hecho el domingo tuvo que regresar al medio por seguridad y ya no mejoró ese 1:39 que había hecho el sábado.
Con un coche puesto a punto, reglado, pudiendo ser forzado sin miedos y hecho a medida de estos neumáticos, cabe esperar que Alonso hubiese rodado, como mínimo, en tiempos muy parecidos a los de las dos primeras filas. Y eso sin hablar del DRS, otro elemento artificial que mejora los tiempos de los coches de 2020, aunque con alerones más bajo tendría menos efecto en los de 2005.
Todo esto, sin tener en cuenta otro asunto, y es que el 2005 fue el último año de los motores V10, pero no en el que fueron más rápidos. Casi todos los récord de esa época los tiene el Ferrari F2004 con el que Michael Schumacher ganó su séptimo título mundial. De 2004 a 2005 hubo un cambio reglamentario, principalmente en las gomas, que hizo los coches un par de segundos más lentos.
En defensa de la Fórmula 1 híbrida cabe decir que aquellos coches tenían ayudas al pilotaje, empezando por el control de tracción, que ahora no existen. Además de que los coches actuales son mucho más largos y anchos que los de entonces, lo que se nota a la hora de entrar y salir de las curvas.
El ritmo de carrera ya sí que es imposible de comparar. Alonso no ha hecho tandas largas con el Renault R25 en esta exhibición de Abu Dabi, y querer equiparar lo de la temporada 2005 con la 2020 es inútil. Por entonces, cuando Alonso ganó su primer mundial, los neumáticos tenían que durar toda la carrera y la vuelta de clasificación.
Ahora hay cambios de neumáticos, pero los coches comienzan con el tanque de combustible lleno, mientras que por entonces había repostaje. Es decir, en 2005 era legal echar gasolina pero ilegal cambiar las ruedas y ahora es al revés, puedes cambiar ruedas pero no echar combustible. Imposible comparar ritmos de carrera así.
Hamilton se tuvo que rendir ante el sonido ensordecedor del Renault R25
Otro debate que ha abierto el show de Alonso es el del sonido de los monoplazas. Daniel Ricciardo lo expresó mejor que nadie, diciendo que se estaba demostrando que "la Fórmula 1 necesita el 'factor wow'". El australiano apuntó que "iba mucho más lento que nosotros. Pero parecía más rápido porque sonaba más impresionante. Intimida más un V10 que un V6".
Lewis Hamilton tuvo la interrupción del R25 de Fernando Alonso el cual le hizo recordar buenos tiempos con aquél sonido del motor V10.#AbuDhabiGP #Fanat1cos pic.twitter.com/Mxd8WrDS4D
— Fanat1cos (@Fanat1cos) December 12, 2020
Lewis Hamilton también se deshizo en elogios en plena entrevista, cuando estaba hablando de otra cosa tras la clasificación y el R25 de Alonso le ensordeció: "Este sonido es muy bueno, que gran sonido. Es el mejor coche de carreras que ha habido", se sinceraba Hamilton entre risas culpables, como al que se le escapa algo que no se debe decir.
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