Una sesión clasificatoria bajo la lluvia y delicada en cuanto a pilotaje ha visto a Fernando Alonso marcar el cuarto mejor tiempo que le valdrá esa misma posición para la parrilla de salida de cara a mañana. El asturiano no se ha dejado amilanar por la gran cantidad de agua en pista y los charcos a lo largo de los siete kilómetros de trazado belga y estará en la segunda fila mañana.
La primera parte de la sesión clasificatoria comenzaba con el asfalto muy mojado y con algunos coches usando neumáticos de agua. Alonso ha sido uno de los pilotos en usar estos neumáticos marcados en color azul, mientras la gran mayoría usaba los intermedios marcados en color verde. Ambas decisiones han funcionado y Alonso ha pasado a la Q2 sin demasiados problemas.
La Q2 ha sido algo más justa para todos los pilotos pero con un Ferrari que ve como sus debilidades se esconden más bajo la lluvia que había vuelto durante esta segunda parte, Alonso ha marcado un tiempo que le servía para pasar a la Q3. Sería ese el momento culminante que puede decidir carreras (aunque en Spa, menos). Al final y a pesar de un pequeño error en Eau Rouge, Alonso ha firmado el cuarto mejor tiempo.
Aunque el tercer puesto, propiedad de Sebastian Vettel, no ha quedado muy lejos, los dos Mercedes han terminado un mundo por delante del Ferrari del asturiano. Para mañana, Alonso es consciente que con pista seca tal y como se espera, será difícil mantener la posición. Apunta a Daniel Ricciardo y a los Williams como principales rivales que en seco rinden mejor. Finalmente, también ha apuntado el uso de los neumáticos como clave de la carrera.
Cree que los equipos intentarán minimizar el uso del compuesto duro del fin de semana (el medio), que es claramente más lento que el blando y no tiene una duración muy superior a la de los blandos. Por lo tanto, habrá que ver exactamente cómo cada equipo decide afrontar este desafio. Por ahora, Alonso dice que lo normal será que se vea la gran mayoría de pilotos con neumáticos blandos en el momento de la salida.
