Fernando Alonso ya está en Spa-Francorchamps para afrontar la undécima cita del campeonato mundial de Fórmula 1. No está en la posición de la tabla que desearía, pero mantiene su confianza en Ferrari y por ello se ve con opciones de "hacerlo bien" en un trazado en el que nunca ha ganado con un F1.
La rueda de prensa de Fernando Alonso en Spa-Francorchamps ha dado mucho que hablar. El español ha hablado de todo un poco: del campeonato, de los rumores... y de una de las comidillas del verano: su relación con Luca Cordero di Montezemolo. Tras el Gran Premio de Hungría pareció que el Presidente estuviera molesto después de que Alonso dijera, supuestamente, que quería un coche como el de sus rivales, pero el español ha confesado que la relación entre ambos es cordial y ha culpado a la Prensa de la forma de comunicar sus palabras.
La relación entre nosotros está mejor que nunca, hemos hablando casi cada día del verano, no solo de F1, de las vacaciones, de la familia, del Madrid, de la Juve que ha ganado la Copa de Italia hace poco… La relación es estupenda, es un gran motivador, el padre de esta gran familia que es Ferrari y sabe mantener el ambiente tan bueno que hay en el equipo, así que cero problemas. Creo que le llegó mala información, hemos hablando de lo que él pensaba que se había dicho en Hungría, pero como ya dijimos allí era el momento adecuado para que hubiese muchos rumores y muchos periódicos que vender, pero dentro del equipo todo está bien
Los resultados de Alonso en Spa-Francorchamps no han sido brillantes, a pesar de que allí lograra una de sus más recordadas victorias en monoplazas con la Fórmula 3000. El segundo puesto conseguido en 2005 es su mejor resultado. Este año confía en hacerlo bien "porque está en Ferrari" y asegura que su motivación "es diez". Siguen buscando la tecla para que las piezas funcionen y puedan mejorar unas cuantas décimas. Está seguro de que pueden remontar la diferencia con Sebastian Vettel... como ya se ha demostrado en temporadas anteriores, a pesar de que el título no llegara.
Sobre quién ocupará el otro asiento de Ferrari el año que viene, Fernando no se ha mostrado preocupado por ver ahí a un piloto de primera línea como podría ser Kimi Räikkönen. "No he tenido problemas con ningún compañero, ésa es la suerte que tienen mis compañeros de equipo”, zanjó el asturiano.
