Pedro Martínez de la Rosa ha confirmado hoy que su retorno pudo no haberse dado. No ha querido dar detalles, e incluso ha dicho que no los va a dar, ni ahora ni más adelante, pero de no haber sido él el elegido, habría sido Giancarlo Fisichella, según supuestas presiones de Ferrari.
Si en la prensa internacional el titular es el de "el retorno del rey", Michael Schumacher, nuestra versión española es la del retorno de Pedro Martínez de la Rosa. Un piloto tan querido por los aficionados como valorado por los jefes de equipo.
Pero durante los últimos años, un gran piloto de pruebas no era necesariamente considerado un buen piloto de carrera, y se valoraba más la velocidad y la juventud que la experiencia. Con la prohibición de los tests, el panorama ha cambiado.
Dicha normativa, que prohibe en gran cantidad los tests durante la temporada, ha significado que la experiencia sea un valor en alza, y De la Rosa se encuentra con un sitio en la parrilla de 2010. Y dicha elección ha recibido incluso las alabanzas del ex-campeón Niki Lauda.
La increible experiencia del agradable español ayudará a Sauber. Ningún piloto ha pasado tanto tiempo en el simulador como Pedro. Es cierto que no tiene la velocidad de un Vettel o un Hamilton, pero sabe llevar un coche a lo más alto, y con el loco japonés, Kobayashi, quien fue para mí la sensación del 2009, está en una muy buena posición.
Sabemos que Niki tiene tendencia a hablar mucho, pero no todos los días se reciben tales palabras de un tres veces campeón del mundo de Fórmula 1. Estamos de acuerdo con el austríaco, y desde luego, el binomio De la Rosa-Kobayashi puede dar muy buenos resultados, si el coche acompaña.
Vía | Motorsport.com
