Una de las cosas que primero se miran cuando se instaura un nuevo sistema de puntuación, es cómo ese sistema hubiera funcionado en los campeonatos anteriores. Hasta 2003, las victorias se premiaban más y con el ya antiguo sistema quedar segundo ya era casi tanto como ganar. La regularidad de unos podría haber jugado a su favor mientras que las victorias de otros podrían haber sido insuficientes.
El nuevo sistema de puntuación de la Fórmula 1 presenta una de las mayores novedades de la historia. De los 9 (hasta 1991) y 10 puntos por victoria a los que estábamos acostumbrados se pasa a 25 por lo que se podría pensar que si miramos retroactivamente los campeones del mundo podrían haber cambiado.
Pero va a ser que no. El nuevo sistema sólamente hubiera cambiado a un campeón del mundo de la última década. Hay que irse a 1999 para descubrir que con este sistema, con el anterior de 10-8-6... también habría ocurrido, Eddie Irvine, el enfant terrible de la épcoa se podría haber impuesto a Mika Hakkinen.
Por tanto los títulos de Jenson Button, Lewis Hamilton, Kimi Raikkonen, el de 2003 de Michael Schumacher (los más igualados de los últimos tiempos) no habrían cambiado de manos a pesar de contar con este novedoso sistema. Eso sí, como dicen en Autosport y como ya dije el otro día, ya nos podemos ir olvidando de las cifras de puntos conseguidos en un mundial, los 614 puntos que consiguió Ayrton Senna en su carrera se antojan pocos para un nuevo sistema que pone en liza 475 por temporada.
Vía | Autosport