Guste o no, Fernando Alonso sigue siendo el gran protagonista del Campeonato del Mundo de F1. En primer lugar porque es el actual Campeón del Mundo; en segundo porque tiene muchas opciones de revalidar el título este año y por último porque todo el mercado de pilotos está paralizado a la espera de conocer el futuro del piloto español.
El asturiano repite una y otra vez que sólo piensa en las tres últimas carreras que restan por disputarse esta temporada y en intentar conquistar su tercer título mundial, pero entretanto, managers, representantes y jefes de equipo se mantienen a la espera para ver cómo se desarrollan los acontecimientos en la turbulenta relación entre Alonso y McLaren.
Sin ir más lejos, el representante de Giancarlo Fisichella, Enrico Zanarini, ha reconocido abiertamente que la continuidad de su pupilo en Renault depende de lo que haga Alonso. Briatore no lo esconde y sigue sin confirmar su pareja de pilotos para el 2008. Toyota está coqueteando con Felipe Massa y espera que la supuesta salida de Alonso de McLaren pueda acabar con el asturiano en Ferrari para así poder hacerse con los servicios del brasileño.
También suenan ya con fuerza los nombres de Nico Rosberg y Jenson Button como posibles sustitutos de Alonso en el caso que el español abandone McLaren. De ser Rosberg el elegido, su vacante podría ser ocupada por el prometedor probador de Renault, Nelson Piquet Jr.
En resumen, que todo y todos están pendientes de lo que haga Alonso dentro y fuera de la pista. En el momento que el bicampeón mundial mueva ficha, todos irán detrás. Es lo que tiene ser el Campeón del Mundo y el piloto referencia de la Fórmula Uno en estos momentos.