Después de un día lleno de inocentadas, aunque cada vez menos por parte de los medios deportivos, hoy nos toca hablar de la cruda realidad. Dentro de ella se encuentra estos días el Gran Premio de Melbourne. Tras la retirada de ING de la Fórmula 1, antes de la carrera disputada en Singapur, la prueba australiana se quedaba sin su primer patrocinador, el cual aun no han podido reemplazar.
Esta falta de apoyos económicos provenientes de patrocinadores puede llevar a tomar la decisión de que sean los contribuyentes los encargados de costear todos los gastos de la disputa de este Gran Premio. Por lo menos eso es lo que asegura el periódico local Herald Sun. Eso si, Drew Ward, director ejecutivo de la prueba se ha apresurado a confirmar que esta falta de apoyos no impedirá que se dispute con total seguridad en 2010. A mi por lo menos me deja mas tranquilo, en cambio los vecinos australianos no se lo que pensaran de esta medida.
Vía l Autosport
