Si anteayer la marca de Ingolstadt comunicaba su renuncia a participar en las Le Mans Series y dejaba la decisión sobre las American Le Mans Series en un "veremos". Ayer mismo se confirmaba que la marca alemana también renunciaba a su participación en las series norteamericanas, tras nueve años participando ininterrumpidamente. El nuevo R15, del que poco o nada se sabe, por el momento solo cuenta con dos participaciones confirmadas. Las 12 horas de Sebring que marcan el comienzo de la temporada estadounidense de resistencia y como no podía ser menos, las 24 horas de Le Mans en junio.
Con esta renuncia, las ALMS pierden a su principal exponente. La ausencia de los Audi dejará la categoría LMP1 como coto privado para los nuevos Acura que a poco que vayan bien no tendrán demasiados rivales. Por otro lado, en LMP2, los Acura ARX-01B tampoco contarán con competencia ya que los Porsche RS Spyder de la categoría tampoco tienen confirmada su presencia. Es más parece poco probable que veamos alguno en parrilla en 2009. Si a lo anterior sumamos que la participación en LMGT1 es anecdótica, esto nos deja al campeonato en una situación comprometida. ¿Merece la pena mantener un campeonato sin calidad?.
