En el Gran Premio de Malasia ambos Red Bull tuvieron problemas con el KERS. En el caso de Mark Webber, desde el inicio de la prueba; ni siquiera pudo emplearlo cuando se apagó el semáforo. Sebastian Vettel, por su parte, se encontró con ellos mediada la carrera, en medio del paseíto que volvió a darse en Sepang.
Los fallos que han tenido en este sistema es el único punto flaco del intocable Red Bull RB7. Ninguno de los dos pilotos de la escudería pudo disfrutar del KERS durante la totalidad del gran premio. El director técnico de Red Bull, Adrian Newey, es consciente de que su KERS aún tiene que mejorar.
La realidad es que el sistema está en su infancia. No somos un fabricante, así que tenemos que desarrollar el KERS nosotros mismos, y no es un área donde nos hayamos especializado en el pasado. También lo estamos haciendo con recursos limitados, un presupuesto limitado y una experiencia limitada; aún estamos aprendiendo. El hecho de que aún estemos encontrando fallos se debe a que el sistema todavía tiene que mejorarse.
El ingeniero inglés también aclaró lo que le pasó a Mark Webber y Sebastian Vettel en Sepang:
Con Mark tuvimos un problema antes del inicio que significó que no pudo usarlo durante la carrera, incluido el arranque. Tuvo un problema en la vuelta de formación, un problema nuevo que no habíamos tenido antes. Con Sebastian tuvimos un problema que nos permitía seguir empleándolo, pero por cuestiones de seguridad pensamos que era mejor desactivarlo y no correr riesgos.
Por cómo se han desarrollado los dos grandes premios en lo que llevamos de temporada, la escudería no ha echado mucho en falta el KERS. Quizá a Webber no le hubiera venido mal para mejorar sus salidas, que se ven penalizadas al no poder emplearlo y que sus rivales sí puedan. Bien distinto es el caso de Vettel, al que prácticamente no le ha afectado. Una situación que podría cambiar si tiene un encuentro cuerpo a cuerpo con algún rival; ahí el KERS puede ser un factor a tener en cuenta.
Vía | Autosport
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