Las propuestas actuales de Citroën siguen siendo fieles a la tradición de la marca, originales en su diseño, llenas de sentido práctico y cómodas. El Citroën C3 Aircross es una de esas propuestas y fue un éxito inmediato, desde su lanzamiento en 2017.
Hoy, este pequeño SUV de 4,16 m de largo, sigue destacando por su relación dimensiones-habitabilidad y su equipamiento tecnológico, así como por su elevado confort. Y además, disponibles desde 20.120 euros, es uno de los SUV más asequibles de los que se fabrican en España.
En este SUV urbano hay espacio de sobra para que cuatro personas puedan viajar de forma cómoda (es un cinco plazas, como en casi todos los coches, el quinto pasajero irá algo estrecho).
Así, en la parte trasera, el espacio para las piernas y la cabeza es grande. No solamente es una cuestión de medidas, sino de distribución (suelo plano sin túnel central), de asientos (los Advanced Comfort con espuma especial son una maravilla) y de versatilidad.
Confort y versatilidad, dos de sus bazas
El Citroën C3 Aircross es uno de los pocos vehículos de su segmento que dispone de un asiento corrido en dos partes. Esto permite variar el volumen del maletero de 410 a 520 litros según su posición. No sólo se desliza el asiento corrido, sino que el asiento del acompañante puede abatirse hasta convertirse en una mesa, algo poco habitual en esta categoría.
A los excelentes asientos Advanced Comfort, se une una suspensión especialmente blanda para hacer del Citroën C3 Aircross el SUV más cómodo de su segmento. En cambio, le falta agilidad en carretera.
El interior del C3 Aircross está dominado por una pantalla táctil de 9 pulgadas, por la que hay que pasar para poder regular la climatización. Sin embargo, no abundan los huecos y compartimentos para guardar objetos.
En cuanto al equipamiento, incluye desde el nivel de acceso el aire acondicionado, los retrovisores eléctricos, calefactables y abatibles eléctricamente, el aviso de cambio involuntario de carril, lector de presión de neumáticos y la función Mirror Screen, que reproduce en la pantalla del coche, la pantalla de nuestro móvil.
También puede equipar, según las versiones, los servicios conectados de la marca, como la navegación con mapas en 3D, información del tráfico en tiempo real, precios y disponibilidad de parkings, precios de combustible en las estaciones de servicio y el aviso de radares, por ejemplo.
A nivel mecánico, el C3 Aircross es uno de los pocos modelos urbanos que todavía no dispone de una versión con etiqueta ECO. Su gama se compone de un motor diésel 1.5 de 110 CV con cambio manual, y dos motores gasolina 1.2, uno de 110 CV asociado a un cambio manual y otro de 130 CV, asociado este a un cambio automático de 6 relaciones.
Más allá de que sólo puede lucir la etiqueta C, los consumos del C3 Aircross son un poco más elevados que los de sus rivales, especialmente en el caso de la versión automática que puede rondar los 7 l/100 km.
La relación dimensiones-habitabilidad, un elevado confort y una relación precio-equipamiento muy correcta, habida cuenta que parte de sólo 20.120 euros, son los puntos fuertes del Citroën C3 Aircross.
Entre las alternativas recomendables al C3 Aircross, nos encontramos, entre otros, con el SEAT Arona, un modelo menos cómodo, pero que gana en aplomo en carretera. Carece de la versatilidad del C3 Aircross y es, por otra parte, más caro atendiendo a las tarifas oficiales de la marca, desde 22.290 euros, aunque siempre puede alguna oferta comercial.
