España es líder mundial en energía eólica, nuestra producción de electricidad en esta renovable está en un 17,5% del total en lo que va de año, siendo el tercer país mundial con mayor producción y el cuarto con mayor potencia instalada. Estos datos se deben a nuestra excelente situación con zonas con grandes corrientes que favorecen esta producción.
Hasta ahora, para recargar un coche eléctrico con energía eólica se podía hacer de dos maneras, que ésta nos llegara a través de la red (contaminada con otras energías sucias) o que hiciéramos un Juan Palomo sistema casero en el cual nos pudiéramos traspasar la electricidad de una turbina eólica doméstica a nuestro coche eléctrico. Pues bien, a partir de hoy podemos recargar a través de energía eólica en Barcelona.
Urban Green Energy Iberia (UGE) y General Electric (GE) acaban de instalar, después de 8 meses de retraso, el primer punto de recarga eólico del mundo en la sede de Cespa, una compañía de servicios medioambientales del grupo Ferrovial, en la Ciudad Condal. El punto de recarga, denominado Sanya Skypump, consta de dos partes; la turbina eólica y el punto de recarga como tal.
La turbina eólica, suministrada por UGE, es un modelo de eje vertical con 4 kW de potencia y un nivel de ruido inferior a 38 dB (por debajo del murmullo en una biblioteca) en su velocidad óptima (43,2 km/h). Gracias a esta turbina tan silenciosa y compacta (sólo tiene 3 metros de ancho) el sistema es ideal para entornos urbanizados, ya que suministra energía limpia sin ruidos ni inconvenientes.
El punto de recarga, responsabilidad de General Electric, es un GE Durastation que permite recargas rápidas a 400 voltios y 32 amperios (12,8 kW). Estos puntos son los mismos que AENA comenzó a instalar en algunos aeropuertos. La potencia de salida del punto de recarga es mayor que la que puede producir el aerogenerador, por lo que si queremos recarga rápida debemos tener el punto de recarga enchufado a la red.
Aunque la mayor ventaja de estos puntos de recarga sería su ubicación fuera de zonas urbanas. Un punto de recarga con un aerogenerador y unas baterías podría servir para recargar coches eléctricos en las carreteras, ya que no sería necesaria ninguna conexión con la red, llegando de esa manera a zonas donde instalar un punto convencional sería excesivamente caro.
Esto sería realizar un sistema parecido a lo visto en puntos de recarga con energía solar, pero teniendo en cuenta que el viento también produce de noche, y que los aerogeneradores de eje vertical tienen unas velocidades de arranque muy bajas (del orden de 10 a 15 km/h); que ayudaría a aumentar la generación.
De introducirse más de estos puntos, iríamos poco a poco hacia una movilidad cada vez más sostenible y con menor impacto medioambiental, lo cual no solo ayudaría a nuestro planeta y nuestra salud, sino también a nuestro bolsillo.
Fuente | General Electric, Urban Green Energy
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