La semana previa a la presentación internacional del nuevo coche eléctrico Nissan LEAF 2013, estuvimos repasando las luces y las sombras del Nissan LEAF original, así como qué podíamos esperar del nuevo modelo. Conociendo el modelo anterior y después de conducir el nuevo, en pocas palabras podemos deciros que en Oslo nos hemos encontrado con un coche que cambia poco, pero que sin duda ha mejorado, aunque haya sido de manera discreta.
A título personal puedo decir que si el anterior LEAF me gustaba, el de ahora me gusta todavía más (aunque no sea perfecto, que ningún coche lo es). Técnicamente se han reformado bastantes más cosas que las que se pueden ver a simple vista a priori, y os las explicaremos en detalle mañana. Hoy hablaremos del coche sin más, de su diseño, interior y maletero.
Nissan LEAF 2013, si gusta para qué cambiarlo
Este subtítulo tal vez pueda sorprender a más de uno, pero es la realidad. Durante estos poco más de dos años que el Nissan LEAF ha estado a la venta en el mundo, algo menos en España, al menos en nuestro país ha habido bastantes conductores críticos con el diseño exterior de este coche eléctrico: en pocas palabras, no les gusta.
Y de este tema pudimos charlar con los ingenieros en la presentación. Porque lo cierto es que el nuevo Nissan LEAF 2013 es casi idéntico, hablando de diseño, al anterior, salvo por sutiles matices de los que ya os hemos hablado (rediseño de la calandra, faros halógenos y nuevas llantas) que pasarán desapercibidos a muchos.
Pues bien, esto puede suceder en España, pero no pasa lo mismo en otros países. En Nissan nos han explicado que en otros lugares el coche gusta, y que la mayoría de los propietarios de un LEAF valoran positivamente su diseño y les gusta que sea tal y como es.
Es más, incluso es un motivo de compra para algunos clientes, que desean un diseño diferente y singular, que no sea tan convencional ni más de lo mismo.
Además de esto los propios ingenieros nos explicaron que habiendo pasado tan poco tiempo en el mercado, y no habiendo una saturación del mismo, no ha llegado tampoco el momento de la renovación estética.
Interior negro o beige, a gusto de cada uno
Una de las novedades del nuevo Nissan LEAF 2013 fue su nuevo interior en color negro, muy diferente al color beige claro, con algunas partes en marrón latte macchiato, que se utilizaba en el LEAF que conocemos.
Pues bien, el beige no desaparece, aunque esto depende de las versiones. En la versión más económica, Visia, y en la versión más cara, Tekna, el interior es negro. Sin embargo en la versión intermedia Acenta el interior puede ser negro o beige, a elección del cliente.
Esto nos parece muy bien, ya que siempre es bueno poder personalizar el coche a tu gusto y en el caso particular del Nissan LEAF su interior claro y luminoso tenía un aspecto muy acogedor. Ahora quien quiera un interior negro, más sufrido y menos vulnerable a las manchas, puede tenerlo, y quien quiera un interior beige como el de antes también puede.
El diseño interior, salvo por las dos nuevas tapicerías, la de tela del acabado Visia, y la de cuero del acabado Tekna, no cambia. Solo hay matices, para aquellos que se fijen en todo.
En el volante aparece un botón Eco, y se recolocan algunos botones del climatizador, para tener un botón "Heat" y un botón "A/C", y controlar manualmente cuándo se enciende el aire acondicionado y cuándo la calefacción, de manera independiente, si no se quiere usar el modo Auto del climatizador (que no es bizona, por cierto). También aparece un botón nuevo "Auto Lock" en la parte baja izquierda, es el anti-desenchufado del cable de recarga.
La calidad de acabado sigue siendo muy buena, de notable alto, incluso aunque todos los plásticos sean duros. Las piezas encajan muy bien, las juntas son pequeñas, no hay bordes afilados a la vista y el aspecto y textura conseguidos son muy aparentes y transmiten buena calidad visual. El tacto de los botones también es muy bueno y sólido.
La tapicería de cuero, con el interior del asiento en cuero perforado, añade un extra de refinamiento interior. De nuevo para los que se fijen mucho: las costuras y las perforaciones son de color azul. Para evitar la sensación de frío que el cuero suele dar en invierno, todos los asientos son calefactables y también el volante.
En cuanto a espacio interior hay que decir que tampoco hay apenas cambios, salvo los 5,3 cm longitudinales que se han conseguido ganar en las plazas traseras. El espacio disponible es bueno (dentro de la media) para las dimensiones que tiene el coche (4,45 m), pero es mejor a la altura de las rodillas (que no tocan el respaldo delantero) que a la altura de los pies, que no se pueden estirar mucho.
Lo diferente con respecto a otros coches es que debido a las baterías el suelo está algo más alto, y las piernas van algo más flexionadas. La altura libre hasta el techo también es buena, así como la anchura. Sin embargo he notado que el resalto del puente central ahora es algo más alto que antes, y estorba un poco más a la plaza central trasera.
En las plazas delanteras el espacio es también bueno, y solo encuentro criticable que el tótem de la consola central es un poco ancho y la rodilla izquierda del acompañante, si este es un poco alto, puede golpear a veces en la parte inferior del tótem (esto ya sucedía antes, que conste).
Los nuevos asientos sujetan bastante bien el cuerpo lateralmente, incluso en la banqueta, notando que uno queda más encajado a la altura de los muslos y caderas. El respaldo no es ni muy duro ni muy blando y tiene un refuerzo lumbar adecuado, aunque no es regulable. Me parecieron bastante cómodos.
El asiento del conductor se regula en altura, y esto hace que según el caso, el pasajero de la plaza posterior pueda notar un poco más de espacio para los pies. El volante forrado en cuero tiene un tacto suave muy agradable, se regula también en altura.
El maletero es más grande, 40 litros más tal y como sabemos (370 litros en total). Las formas resultantes no son demasiado regulares, pero esos 40 litros dan para llevar una maleta más, por ejemplo, y aunque haya que recolocar las cosas un poco para aprovechar el espacio que se gana, la mejora está ahí.
La caja negra rectangular que se ve en las fotos es del equipo de sonido de altas prestaciones Bose del acabado Tekna, las otras versiones no la tienen, y el suelo del maletero queda plano. El repaldo de los asientos traseros se abate en dos partes asimétricas, pero quedan un poco altos, aunque aún así es mejor que antes. La boca del maletero es bastante ancha gracias a que los pilotos son estrechos y verticales.
En la segunda parte de mañana hablaremos de la conducción y autonomía en la prueba del nuevo Nissan LEAF 2013 (durante la cual hacía un poco de frío y niebla).
Continuará...