Cada año decenas de niños en el mundo mueren atropellados cuando los vehículos circulan marcha atrás o se encuentran realizando maniobras de estacionamiento. La tecnología para poder evitar esto es sencilla, bastaría con instalar en los vehículos cámaras de visión trasera que nos permitieran ver aquellos ángulos muertos que dejan los espejos retrovisores.
El Gobierno de los Estados Unidos lleva desde el año 2008, época en la que gobernaba George W. Bush, intentando que se aplique una Ley de Seguridad en el Transporte firmada por este y que pudiera obligar ahora a instalar en todos los coches nuevos, que se vendieran a partir del uno de enero de 2015, cámaras de visión trasera.
Esta decisión tenía que haber entrado en vigor en enero de este mismo año que acaba de comenzar, pero a lo largo de 2013 ha sido retrasada un par de veces por parte de los fabricantes de automóviles, alegando excesiva severidad de la norma a cumplir.
Dependiendo de la severidad de la norma, los fabricantes podrían estar obligados a instalar en los vehículos cámaras de visión trasera o podrían optar por sistemas de menor costo, como rediseño de los espejos retrovisores, para reducir las probabilidades de que un niño se quede detrás del vehículo, o instalar sensores de alerta de proximidad.
Una nueva regulación ha sido remitida por la Administración Nacional de Seguridad en las Carreteras, NHTSA, a la Casa Blanca para su estudio el pasado día 25 de diciembre y el Gobierno del Presidente Obama ya ha afirmado que tiene intención de sacar la norma lo antes posible, para que sea de obligado cumplimiento a primeros de año de 2015.
Vía | Automotive News En Motorpasión Futuro | Tecnología que salva vidas y ahorra combustible para tu nuevo coche
