El nuevo Toyota Prius aún no ha llegado al mercado europeo, pero de momento deja una estupenda tarjeta de visita: ha conseguido recorrer más de 5.000 km firmando un consumo medio de 2,5 l/100 km. Y no en su versión PHEV, sino en la híbrida sin enchufe.
Esta marca le ha servido para llevarse un récord Guinness, en el que ha sido clave una conducción pensada al milímetro. Pero no deja de ser una cifra estratosférica que será complicada de batir. Y muy similar, sino mejor, a récords conseguidos por coches diésel.
Pasando solo tres veces por la gasolinera
Wayne Gerdes a los mandos de un Toyota Prius 2023 de serie (que ya se vende en EE.UU), ha sido quien ha firmado la gesta. Comenzó su periplo firmado a finales de mayo de este año en el Ayuntamiento de Los Ángeles y llegó al de Nueva York, completando un total de 5.168,7 kilómetros.
El consumo medio registrado de esos casi 5.200 km fue de 2,525 l/100 km, cifra con la que se ha convertido en el coche híbrido con el menor consumo de combustible de costa a costa en EE.UU. Con esta marca ha conseguido desbancar al Kia Niro, que ostentaba este récord desde 2016. El surcoreano firmó de costa a costa 3,07 l/100 km, aunque hay que tener en cuenta que su recorrido fue mayor: 6.000 km.
Son cifras similares a las conseguidas por coches de diésel firmando récords de eficiencia, o incluso mejores. Por ejemplo hace casi 10 años, un Honda Civic 1.6 i-DTEC logró una media de 2,8 l/100 km en un viaje de casi 13.500 km. Y un Peugeot 208 también batió el record mundial recorriendo 2.000 con un sólo depósito de 43 litros y un consumo medio de 2,0 l/100 km.
Aunque no se indica cuántas veces se detuvo a repostar, si tenemos en cuenta el consumo y el depósito del Prius (43 litros), Gerdes habría parado cada 1.700 km aproximadamente. Es decir, que unas tres veces en todo el trayecto.
Las manos importan y planificar aún más. Estas dos gestas en pruebas de eficiencia de largo recorrido con un coche híbrido tienen algo en común: en ambas ocasiones Wayne Gerdes iba a los mandos. Todo un hypermiler, experto en conducción eficiente.
Según explica, intentó hacerlo lo más real posible y por una ruta que no favoreciera especialmente un bajo consumo. Gerdes afirma que el trayecto incluyó carreteras de montaña a 2.100 m de altura. También tramos con temperaturas extremas, pues atravesó el desierto de Mojave con el termómetro superando los 40ºC.
Aunque siendo justos hablamos de mayo, un mes en general amable en temperatura. Tampoco indica la velocidad media de todo el trayecto.
"Para intentar batir un récord como este, es necesario planificar mucho", señala Gerdes. "Tienes que tener un plan, pero también tienes que poder trabajar sobre la marcha. Así que, si las cosas cambian, tienes que modificar tu plan. Reorientar. Pensar qué vas a poder hacer para lograr ese objetivo".
¿Menos de 4,0 l/100 km en el día a día? Esto se aleja de de una conducción realista a menos de que nos planteemos un reto semejante o queremos ganar una apuesta de eficiencia. Pero Gerdes señala que en el día a día, sin volvernos muy locos, es posible reducir el consumo siguiendo algunos consejos básicos. En realidad, muchos conductores seguramente ya los apliquen.
Por ejemplo, acelerar suave y progresivamente tras una detención o mantener una presión uniforme en el acelerador. También soltar el pedal antes de frenar cuando nos aproximemos a tráfico lento y por siempre levantar en bajadas y descensos.
En todo caso, conseguir esos 2,5 l/100 km o acercarse será complicado: como recuerda Toyota esta variante de su nuevo Prius homologa en ciclo EPA (más estricto que el WLTP) un consumo mixto de 4,1 l/100 km. Es decir 1,6 l/100 km más a la cifra conseguida por Gerdes.
Pero quizá sí que es posible calcar ese gasto medio haciendo una conducción eficiente sin llegar a ser obsesiva, lo que ya es notable para un coche compacto y equipado con un sistema híbrido, por lo que no es un peso pluma. Y es que en este modelo la autonomía se fija en 1.036 km, precisamente la propia de un diésel.
Decir que este Prius híbrido sin enchufe equipa un motor gasolina tetracilíndrico de 2.0 litros combinado con uno eléctrico para firma una potencia de 194 CV. Su batería, como buen híbrido sin enchufe es muy pequeña que apenas le otorga autonomía en modo exclusivamente eléctrico.
