El antaño primer mercado automovilístico del mundo revive su peor temor: la escalada de los precios del combustible. Según un estudio reciente, el precio medio de la gasolina ha llegado a los 4 dólares/galón en Estados Unidos por primera vez desde 2008. Es una barrera psicológica muy importante para ellos.
Para hacernos a la idea, tenemos que acordarnos de lo que pasó en 2008. Algunos surtidores no estaban diseñados para marcar precios por encima de 3,99 dólares. Estos precios son prácticamente el doble que los del año pasado, es como si tuviésemos nosotros la gasolina a 2 euros el litro, más o menos.
Sin embargo, la noticia tiene una lectura positiva, y es que va a recordar a los fabricantes norteamericanos la necesidad de seguir insistiendo más en la economía de combustible. Y eso que ya se habían dado pasos… por ejemplo Chevrolet ya vende más motores de cuatro cilindros que de otros tipos juntos.
Cuando los precios son tan altos allí, las ventas de híbridos aumentan y estimulan la salida de nuevos modelos. Los japoneses ya han hecho los deberes, y los norteamericanos han descuidado un poco ese tipo de oferta. Recientemente recuperaron la semihibridación con el Chevrolet Malibu Eco (no han querido llamarlo Hybrid).
Con precios de gasolina elevados, el sobreprecio de los híbridos sobre los gasolina equivalentes se amortiza mucho antes. También estimulará la venta de coches eléctricos, especialmente el Chevrolet Volt y el Nissan Leaf. Ya es la segunda vez que superan esta barrera psicológica y puede pasar más veces.
En los últimos años, Estados Unidos está que no hay quien lo reconozca. Proliferan los cuatro cilindros, los motores con turbo, la reducción de cilindrada, los híbridos, turismos a gasóleo (de procedencia europea), el consumo de biocombustibles, venta de coches pequeños (Aveo, Fiesta) e incluso el regreso de los coches eléctricos.
Los fabricantes norteamericanos reaccionan muy bien ante dos tipos de espoleos: presiones del Gobierno para reducir los consumos/emisiones y la subida del combustible. Los resultados no llegan inmediatamente, pero acaban llegando. Y mercados como el europeo también pueden salir beneficiados de todo esto.
El petróleo demuestra una vez más su gran volatilidad en estos últimos años, después de décadas de estabilidad en precios y con la promesa de la gasolina abundante y barata por los restos. Eso ya no es así, y puede pasar a la mínima que el calentamiento global político se anime un poco, véanse las revueltas árabes.
En EEUU se han visto grandes movimientos, tanto pro-híbridos (2004 en adelante) como pro-eléctricos (aprox. 1995 a 2005). Cuando se lo proponen, pueden competir en eficiencia con europeos o asiáticos. Pues que sigan por esa vía, que al final, todo son ventajas para el mercado mundial tarde o temprano.
Fotografía | aaron_anderer (I)
Vía | Hybrid Cars