Para que la adopción del coche eléctrico en Europa sea más importante se necesitan coches asequibles. En Estados Unidos, la lucha se centra en proponer pick-ups. De Tesla a GM pasando por Ford y su F-150 Lightning, todos necesitan una pick-up eléctrica.
Ram, la marca del grupo Stellantis, también ha presentado una nueva pick-up eléctrica, pero volviendo al concepto resucitado hace poco por Mazda con su MX-30 e-Skyactiv R-EV, el eléctrico de rango extendido.
En el caso de la Ram 1500 REV Ramcharger (es su nombre completo), no hay un pequeño motor rotativo para alimentar los motores eléctricos y la batería de iones de litio de 92 kWh, sino un V6 gasolina de 3.6 litros.
Para un mercado como el estadounidense con problemas de infraestructuras mayores que en Europa, la autonomía de esta pick-up no es un problema. La marca anuncia una autonomía de hasta 1.111 km (690 millas).
Como referencia, el Ram 1500 eléctrico tope de gama tiene una enorme batería de 229 kWh para 800 km de autonomía. Eso es, sin nada en la plataforma de carga ni tampoco tirando de un remolque. Algo que, con un generador a bordo, no será un problema para este Ramcharger.
Por supuesto, la batería de 400 V se puede recargar enchufando el coche a la red y en los puntos de carga rápida. Acepta potencias de hasta 145 kW y tiene capacidad de carga bidireccional, lo que significa que puede alimentar una casa u otro vehículo eléctrico con una potencia de hasta 7,2 kW.
Por otra parte, Ram presume de potencia, como muchas veces con los eléctricos. Hablamos de 663 CV y 834 Nm de par motor. Eso debería ser suficiente para impulsarlo a 60 mph (96 km/h) en sólo 4,4 segundos.
La potencia proviene de dos motores eléctricos, uno en cada eje. El delantero produce 335 CV (250 kW) y el trasero otros 320 CV (238 kW). Están alimentados por el V6 gasolina de la familia Pentastar, de la época Chrysler, que sirve como generador de 130 kW que va asociado a una batería de 92 kWh.
Todo eso tiene un precio y aunque todavía no se conocen las tarifas de la Ramcharger, pero se habla de un precio de 90.000 dólares.
A efectos técnicos y legales, se trata de un coche eléctrico, ya que es exclusivamente la energía procedente de la batería la que mueve las ruedas del coche. El motor de gasolina funciona únicamente como generador y no hay ninguna salida física del motor que pueda hacer girar las ruedas del Ramcharger.
El planteamiento de Stellantis con esta pick-up va a contracorriente de lo que proponen el resto de marcas del sector. Si bien propone una versión 100% eléctrica, con enorme batería de más de 200 kWh, para Ram se trata de crear un producto que se adapte al estilo de vida del cliente, en lugar de intentar cambiar ese estilo de vida.
Y eso, en lo que es el tercer coche más vendido de Estados Unidos (223.049 unidades en lo que va de año), por delante del Tesla Model Y, no es baladí. Es un enfoque más pragmático y también, en teoría, una manera de acercar un público reacio al coche eléctrico a la movilidad eléctrica. El tiempo dirá si Stellantis ha dado con la fórmula o no.
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