NEVS, o National Electric Vehicle Sweden, no está muerta. La firma china da incluso señales de vida esta semana con la presentación de sus dos primeros coches realizados después de la compra de SAAB, hace ya unos años. Así, ha desvelado esta semana los NEVS 9-3 EV Concepto, es decir, su versión de las antiguas berlinas SAAB 9-3 y SAAB 9-3X.
NEVS se prepara a la producción a gran escala de estos coches, que vimos como prototipos en 2014 (sobre la base de un modelo que data de 2003). Sin embargo, se destinarán exclusivamente para un programa de coche compartido (car sharing) en la ciudad china de Tianjin (cuarta urbe china con más de 15 millones de habitantes). Y aunque NEVS posee la antigua factoría SAAB de Trollhättan, todo apunta a que esos coches se fabricarán en China.
De nuevo, el SAAB 9-3 sirve de base
NECS no posee los derechos de uso de la marca SAAB, aún así el parentesco con el SAAB 9-3 es evidente. Es más, NEVS no se corta y explica en su comunicado que estos 9-3 “se basan en más de 70 años de experiencia e ingeniería de SAAB Automobiles” y recuerda la “herencia sueca” en su diseño.
A nivel estético los cambios más significativos son unos nuevos faros y pilotos traseros, así como la ausencia de retrovisores sustituidos por cámaras. En cuanto al aspecto técnico, NEVS habla de una autonomía de 300 km, actualización del coche over-the-air y punto Wi-Fi a bordo.
La marca asegura, además, que equipan filtros de partículas de nueva generación ACAC (Always Clean Air Cabin) para el habitáculo. Estos filtros son considerados los más eficaces del mercado y son capaces de eliminar en menos de un minuto la mayoría de las partículas nocivas para la salud. Queda por saber cómo funcionará en una megalópolis china.
Apuesta estatal por la movilidad eléctrica
En teoría, NEVS lo tiene todo en marcha, incluso más de 180.000 pedidos de organismos y entidades públicas chinas. En diciembre de 2015, Panda New Energy, una empresa de leasing china, aseguró que se haría con 150.000 coches. Cuando el SAAB 9-3 salió al mercado, a finales de 2003, no supuso ninguna revolución, es muy probable que el NEVS 9-3 cause todavía menos sensación.
Sin embargo, habida cuenta de los incentivos y agresiva promoción del coche eléctrico en China, prácticamente cualquier compañía local que se apunte a la movilidad eléctrica tiene el éxito asegurado.
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