Esta historia es lo más texano que vas a ver hoy: un duelo entre un repartidor y tres vaqueros en la carretera

Esta historia es lo más texano que vas a ver hoy: un duelo entre un repartidor y tres vaqueros en la carretera
2 comentarios
HOY SE HABLA DE

Las historias que viven los repartidores a domicilio a lo largo de una jornada da para varias películas de todos los géneros, o casi, pero nunca pensé que daría para un western. Un repartidor de Texas se encontró con tres vaqueros encima de sus caballos en medio de una carretera y uno de ellos le disparó.

Esa entrega ya empezó mal para Matthew, el protagonista involuntario de esta extraña historia. De camino de una entrega en un pueblo del condado de Fort Bend, se encuentra con un atasco de varios coches en lo que tiene más de pista rural que de carretera. Un atasco causado por tres vaqueros a caballo que impiden a los coches pasar.

Cowboys y repartidor en un duelo al anochecer

“Me encuentro con una larga fila de coches. El atasco es por estos tres vaqueros a caballo”, dijo Matthew a una cadena local de televisión tras publicar su historia en Reddit. “Para mí está claro que buscaban crear problemas”. Matthew se dirigía a hacer una entrega en el condado de Fort Bend, Texas, cuando se topó con los jinetes que bloqueaban ambos carriles.

Algunos conductores con pickups y SUV, hartos de estar detrás de los tres jinetes, los adelantaron por la cuneta como pudieron. Pero ni con esas los supuestos vaqueros se movían. Y por fin le llega el turno a Matthew de poder la misma maniobra, pero conduce un Hyundai Sonata, por lo que meter el coche por la cuneta no le parece la idea más sensata. Baja la ventanilla y pide por favor que se echen a un lado para que pueda pasar. “Me dicen que cierra la p*** boca”, explica.

“Inmediatamente intenté una vez más esquivarlos yendo por el camino más alejado de mis intentos anteriores, pero el jinete de la izquierda se puso rápidamente delante de mí de nuevo, obligándome a frenar de golpe y a soltar un sonoro ‘pero qué c***’, lo que al parecer hizo que el vaquero entrara en cólera cuando me oyó”, cuenta en Reddit.

Fue entonces cuando las cosas se pusieron más bizarras y peligrosas. “Uno de ellos se apeó de su caballo. Otro jinete se puso a mi derecha y me bloqueó. Y entonces el que se bajó delante de mí dijo que me iba a reventar la cabeza”, cuenta Matthew, al mismo tiempo que sacaba una pistola y apuntaba a la cabeza de Matthew.

En ese momento, el instinto de supervivencia hizo que hundiera el pie derecho en el acelerador y logró zafarse de los tres vaqueros sin atropellar a ningún de los jinetes ni sus monturas. Casi al momento oye como una explosión y no le da más importancia. Sigue su camino hasta llegar a la carretera general mientras está hablando con la policía por teléfono y ve por el retrovisor cómo los tres jinetes de la tontería intentan seguirle a caballo.

Es sólo unos momentos después, en una gasolinera cercana, cuando uno de los policías que acudió se da cuenta que el portón de maletero tiene un impacto de bala.

Abren el maletero, ven un agujero en el respaldo del asiento trasero y una sartén doblada. En el suelo del coche, detrás del asiento del conductor, la bala. Si no llega a ser por una sartén que su tía insistió que se llevara, Matthew tendría una bala en su espalda y quizá no podría contar esta historia.

Y ahora viene el colmo. Matthew hacía un reparto para Door Dash, la mayor empresa de repartidores a domicilio de Estados Unidos. Lógicamente, llegó tarde a la entrega; tres horas más tarde, en concreto. La mujer que esperaba el pedido entendió la situación y en Door Dash estaban al tanto de lo ocurrido.

“El cliente añadió la friolera de 10 dólares de propina al pedido cuando me fui, con lo que mis ganancias totales por la entrega ascendieron a 25 dólares por casi ser asesinado”, escribió Matthew. Pero en DoorDash decidieron que había tardado demasiado e iban a proceder a suspender su cuenta de repartidor.

Matthew se desahogó en Reddit y el hilo se hizo viral atrayendo incluso la atención de la televisión. La oficina del sheriff del condado de Fort Bend sigue investigando. Mientras tanto, Matthew presiona para que se haga justicia y comparte su historia para que nadie más acabe en la misma situación.

Temas