Estos últimos meses, Tesla ha bajado el precio de algunos de sus modelos durante unas semanas, como los del Tesla Model 3, para intentar entregar un número récord de coches y así evitar que este año tenga una baja de ventas, lo que sería algo inédito en una década. Sin embargo, la contrapartida parece ser una calidad de fabricación inferior a la habitual.
Varios propietarios con Tesla recién salidos de fábrica están sufriendo un grave contratiempo: el ordenador central de sus nuevos coches está fallando tras apenas unos meses de uso, dejando estos automovilistas sin Autopilot, sin ABS o sin ESP (control de estabilidad y tracción) e incluso sin limpiaparabrisas. Sin embargo, para la marca esto no parece ser un problema.
Un fallo en el ordenador central y se acumulan los problemas
Desde hace varias semanas, muchos compradores de Tesla informan de fallos en el sistema informático de sus vehículos. La causa: la nueva versión del ordenador HW4, a veces denominada internamente “AI4.1”. Este componente esencial, que debe gestionar funciones como la conducción autónoma, las cámaras y el GPS, está dejando de funcionar, inutilizando varios de los sistemas críticos del vehículo.
Según fuentes internas anónimas consultadas por Electrek, el problema se debe a un cortocircuito. Una de las hipótesis planteadas es que se trata de un problema de gestión de energía de la batería de 12V, esto haría que se dañe el ordenador durante el proceso de calibración de la cámara del sistema Autopilot FSD. Como resultado, no solamente los conductores pierden las funciones de conducción autónoma, sino también los sistemas de seguridad activa (ABS, ESP, mantenimiento de carril), la navegación GPS e incluso hasta las estimaciones de autonomía.
El fenómeno no está afectando a unos pocos coches aislados, sino a una gran parte de los vehículos equipados con este nuevo ordenador y fabricados en los últimos meses. Los equipos de Tesla se esfuerzan por hacer frente a la avalancha de quejas, pero parecen estar saturados por estas quejas.
Aparentemente, el fabricante incluso ha pedido a sus técnicos que resten importancia a las preocupaciones de los clientes sobre la seguridad, para evitar que consideren sus vehículos inutilizables.
Por el momento, la única solución propuesta por la marca es la sustitución completa del ordenador defectuoso. Al mismo tiempo, Tesla estaría trabajando en un parche de software para intentar evitar temporalmente el problema. Nos hemos puesto en contacto con Tesla España, pero sin respuesta por su parte.
Estos fallos llegan en un momento estratégico para Tesla. El fabricante aspira a alcanzar una cifra récord de entregas a finales de año para evitar un descenso anual por primera vez en diez años. Pero este fallo podría complicar sus objetivos y dañar su imagen de marca teniendo que efectuar una notable llamada a revisión, una física está vez para sustituir el ordenador.
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