G-Power BMW M3 GT2 S Hurricane: una bestia de calle y circuito con 720 CV

G-Power BMW M3 GT2 S Hurricane: una bestia de calle y circuito con 720 CV
3 comentarios

Los tiempos cambian y los fabricantes de automóviles evolucionan con nuevas generaciones de sus modelos, pero los clientes más puristas siempre prefieren echar la vista atrás y quedarse con versiones anteriores, "pata negra". El preparador alemán G-Power ofrece modificaciones para los últimos modelos del mercado, pero también para los pasados, como es el caso de este BMW M3.

El especialista ofrece para este M3 de anterior generación con motor V8 una brutal preparación protagonizada tanto por el llamativo kit de carrocería de fibra de carbono -que además de mejorar la aerodinámica reduce el peso del conjunto con puertas o capó fabricados en este ligero material- como por las profundas modificaciones a nivel mecánico, que no son 'moco de pavo'. Así pues, el M3 se convierte en un arma de calle y circuito.

El corazón de este modelo bávaro denominado ahora M3 GT2 S Hurricane es su motor V8, que pasa de una cilindrada de 4.0 litros a 4.5 litros, gracias a un nuevo cigüeñal, junto a pistones forjados y bielas, o un sistema de sobrealimentación por compresor (SK III RR) que catapulta la potencia máxima desde los 420 CV de serie hasta nada menos que 720 CV a 7.800 rpm y 650 Nm de par. El resultado es un 0-200 km/h en 9,8 segundos y una velocidad máxima de 330 km/h.

G-Power BMW M3 GT2 S Hurricane
G-Power BMW M3 GT2 S Hurricane

Por supuesto, con semejante potencial también hace falta meter mano a otros elementos, como la suspensión (G3M-RS Clubsport), que ahora está compuesta por amortiguadores ajustables de tipo coilover y tiene una puesta a punto "Nürburgring Setup", o el equipo de frenos, con discos cerámicos de carreras y pinzas de seis y cuatro pistones. Las llantas forjadas de 19 pulgadas y aleación ligera montan neumáticos Cup en dimensiones 295/30 ZR19 y 325/30 ZR19.

A todo lo anterior hay que sumar elementos para la correcta refrigeración en un uso en circuito, como el radiador de aceite adicional para el diferencial autoblocante trasero, sistema de extinción de incendios o un sistema hidráulico para elevar la carrocería (al estilo de los usados en competición) que permite realizar reparaciones o cambios de neumáticos de manera rápida.

Por último, en el habitáculo destaca la ausencia de asientos traseros o de material aislante, la instalación de una jaula antivuelco, asientos deportivos tapizados con alcántara (igual que el techo o el salpicadero), recubrimientos de fibra de carbono para reducir aún más el peso o un display digital haciendo las veces de cuadro de instrumentos. Eso sí, para adquirir el vehículo totalmente preparado, tal y como lo ves en las imágenes, hay que desembolsar 292.883 euros.

Vídeo | Youtube

Temas
Comentarios cerrados