No es la primera ni será la última vez que en España vamos a remolque de otros países en algún tema relacionado con el automóvil. En ésta ocasión me toca hablar de matrículas, y no precisamente de las multas que te pueden caer por cambiarlas en marcha para engañar a los radares.
Las protagonistas de hoy son las matrículas plásticas. Históricamente en España las matrículas de coches, motos y otros vehículos eran siempre metálicas, con los consiguientes riesgos que ellos conlleva. En caso de atropello o en caso de accidente, una matrícula metálica puede convertirse en un auténtico cuchillo para los implicados.
En otros países como Inglaterra, Francia o Portugal las matrículas son de plástico, un material mucho más seguro en caso de accidente, más resistente a las inclemencias del tiempo y por qué no decirlo, que sienta mejor al aspecto del vehículo, son las habituales. Pero aquí todavía estábamos un paso por detrás de ellos…
Por suerte, desde hace algo más de un año en España se pueden instalar matrículas plásticas en los vehículos de forma completamente legal. Para adquirir una, puedes hacerlo a través de los múltiples distribuidores repartidos por toda España o hacerlo a través de internet.
Tan solo hay que tener a mano el permiso de circulación de el/los vehículos para los que vayamos a solicitar la placa y el DNI de la persona que la solicita, sea o no el propietario del vehículo.
El precio suele rondar los 15 euros por placa sin IVA, al cual hay que sumarle los gastos de envío si no acudimos a un distribuidor. Vamos, que por poco más de 30 euros tendrás un juego de placas de matrícula que le pueden dar ese toque de aire fresco que tu coche necesita.
A continuación os dejo un par de vídeos dónde se demuestra la resistencia de éstas matrículas frente a las metálicas.
Últimamente he visto muchos coches y motos con estas nuevas matrículas de plástico. ¿Algún día nos pondrán esta cuando compremos un coche nuevo en lugar de la vetusta placa metálica?
Vía | Ecomatricula