Un vecino de San José en California (EE.UU.) vive una pesadilla desde hace más de 50 años: hasta 23 veces han chocado coches contra su casa, algunas veces entrando literalmente hasta la cocina o el salón.
Se da el caso que su vivienda está frente a la salida de la autopista: los coches y vehículos que no frenan lo suficiente acaban estampados contra su hogar.
La administración le ha ignorado durante más de medio siglo
Ray Minter es el residente de este funesto domicilio, que se ubica en el cruce de Bambi Lane con Jackson Avenue. Como se puede ver en Google Maps, no puede estar más enfrente de una de las salidas de la Interestatal 680.
Tras la construcción de la autopista en la década de los 70 del siglo pasado, ha sufrido el mismo capítulo más de una veintena de veces: un coche impactando contra su vivienda, que ya estaba allí antes de la llegada de esta vía rápida.
El último, según recoge el medio local San Jose Spotlight, tuvo lugar mientras dormía. Un fuerte impacto lo despertó: era una enorme pick-up GMC High Sierra, que acabó en su sala estar, paso previo por el garaje y destrozando su propio coche. Desde que sufre este problema mayúsculo ya se ha quedado sin tres automóviles.
Y es que la pick-up también superó las barreras que ha construido a lo largo de los años, precisamente para evitar que los coches se acaben llevando por delante parte de su casa. Obviamente, en más de una ocasión ha sufrido daños estructurales y en aquella ocasión fue uno de los más graves.
Homeowner on Jackson Ave in SJ says,it's the 19th time his house has been hit by a car, #kron4news pic.twitter.com/f7r7FpAHRP
— jackiesissel (@jackiesissel) June 14, 2016
Minter ha invertido a lo largo de los años más de 30.000 dólares en "blindar" su domicilio con barreras: ha construido un muro de ladrillos justo en la esquina y una alambrada que se apoya en postes de metal de 38 cm de diámetro hundidos en el suelo. También ha colocado rocas, para evitar los impactos.
Pero si el que entra a Jackson Avenue va muy "pasado" no son suficiente: estas barreras las ha tenido que reparar un buen puñado de veces.
Obviamente lo ha denunciado a la administración y ha solicitado que se tomen medidas para evitar que los coches acaben destrozando su casa. "Básicamente me dijeron que a menos que alguien muera, no pueden hacer nada", explica Minter a este medio.
Porque en estos 50 años estos accidentes han provocado daños materiales, pero afortunadamente no ha habido que lamentar fallecidos. Aunque ha estado cerca. En una ocasión casi se llevan por delante al padre de Minter y en otra su sobrina acabó en el hospital, pero sin heridas de gravedad.
Minter considera que este problema podría solucionarse por ejemplo si se prohíben los giros desde en carril central de la salida la autopista a Jackson Avenue, pues lo señala como la principal causa de estos accidentes. Pero las autoridades han hecho oído sordos durante todo este tiempo.
Obviamente, cuando se proyectó el cruce falló el estudio de seguridad, lo que ha resultado ser nefasto para este pobre residente. Pero parece que por fin se van a tomar medidas: la ciudad de San José ha solicitado una subvención federal en materia de transporte para mejorar Jackson Avenue.
"El plan conceptual también incluye una reconfiguración de la intersección que incluye la rampa de salida de la I-680 y Bambi Lane, que es un lugar donde, según los informes, se impactó contra una casa", ha señalado Colin Heyne, portavoz del departamento de transporte de San José. La vivienda es la de Minter, aunque se obvia que ha ocurrido reiteradas veces.
Además, se ha planeado la construcción de una mediana ajardinada o la colocación de barreras de metal y plástico para aumentar la seguridad en varias intersecciones de la autopista con esta calle y otras.
No obstante, va a tener que esperar: si la subvención se otorga el año que viene, la construcción no comenzaría hasta 2026. Le quedan por tanto varios años en los que puede seguir padeciendo que los coches acaben destruyendo parte de su casa. Otra vez.