Probamos el Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ en el Circuito de Ascari bajo la lluvia: un V8 biturbo de 612 CV delicioso en carretera y bestial en pista
El nuevo Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+, diseñado para ser exprimido al máximo en circuito y ofrecer el mejor rendimiento en carretera, une lo mejor de dos mundos. Ha sido el último miembro de la familia AMG GT en llegar y, hasta que llegue el GT R PRO, se sitúa en lo más alto de la gama GT 63 junto al GT 63 S E, pero con un V8 biturbo de 612 CV bajo el capó.
Este coupé deportivo, que tiene a las versiones más potentes del Porsche 911 en su punto de mira, ofrece ahora más potencia, una refrigeración mejorada y una puesta a punto brutal para un rendimiento y una dinámica de conducción superior. Para comprobarlo, hemos tenido el privilegio de conducirlo en el Circuito de Ascari (Málaga), y estas son nuestras impresiones.
Características del Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+, el GT 63 más picante hasta la fecha
En Affalterbach han querido redondear aún más su supercoche más práctico, pues nos cuentan que “basándose en la demanda de los clientes de mejorar la practicidad diaria en comparación con la versión anterior”, la segunda generación del AMG GT 63 es ligeramente más suave, cómodo y práctico que antes. Además, ofrece mejor visibilidad y más sensación de amplitud.
Bendita sea aquí la máxima de que ‘el cliente siempre tiene la razón’, pues gracias a ellos nació el GT 63 más picante de Mercedes-AMG hasta la fecha, que debutó en el pasado Goodwood Festival of Speed. “Hemos aumentado el rendimiento del motor y mejorado la aerodinámica con elementos como el nuevo faldón delantero y deflectores de aire adicionales en los bajos”, decía Michael Schiebe, el CEO de Mercedes-AMG.
En persona este superdeportivo coupé impacta y enamora a partes iguales. ‘Bello y Bestia’ a la vez, el nuevo AMG GT 63 PRO no presenta grandes diferencias estéticas con su predecesor, pues se han introducido los cambios justos y necesarios para lograr las mejoras dinámicas que se buscaban. Una de las más notables es el paquete exterior de fibra de carbono, de serie.
En el frontal, uno de los elementos que más destaca es el nuevo paragolpes con entradas de aire en los extremos, que refuerzan su presencia y a la vez son muy efectivas. También son nuevos los deflectores adicionales, el difusor y un alerón trasero fijo que ahora genera 15 kg más de carga aerodinámica a alta velocidad, contribuyendo a mejorar la estabilidad del coche.
Para enfriar mejor el motor, sobre todo cuando funcione a pleno rendimiento, se ha recurrido a la refrigeración por agua de los diferenciales trasero, central y delantero. Así, tenemos dos radiadores adicionales en los pasos de rueda delanteros y se ha mejorado algunos componentes de la transmisión mediante bombas eléctricas.
En adición a estas mejoras, el nuevo perfil aerodinámico activo en los bajos también contribuye a reducir la carga del eje delantero, aumentando la precisión y agilidad de la dirección al mismo tiempo.
Además de la aerodinámica mejorada y la nueva gestión del flujo de aire, los ingenieros de Affalterbach han mejorado el corazón V8 biturbo de 4.0 l de su predecesor, exprimiéndolo hasta los 612 CV y 850 Nm. Tan brutal como suena. Toda esta fuerza la gestiona una transmisión AMG Speedshift de nueve velocidades y la envía a las cuatro ruedas a demanda gracias al sistema de tracción total AMG Performance 4Matic +.
El resultado es un 0 a 100 km/h que no varía, pero un 0-200 km/h en 10,9 segundos (0,5 segundos menos) y una velocidad punta de 317 km/h. Como era de esperar, el GT 63 PRO está equipado con prácticamente todos los elementos del chasis que ya conocen los ingenieros de AMG.
Otra novedad importante es el potente sistema de frenos con discos carbocerámicos de 420 mm de diámetro en el eje delantero y pinzas de hasta 6 pistones en negro.
Para redondear el conjunto, tenemos unas llantas forjadas específicas de 21” que envuelven unos neumáticos Michelin Pilot Sport 5. Como opción, pero sin sobrecoste, se pueden montar unos Pilot Sport Cup 2 R, siendo estos más indicados para circuito que para carretera.
Ficha técnica Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ 2025
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Motor |
Ocho cilindros en V con inyección directa y doble turbocompresor |
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Potencia |
612 CV (450 kW) |
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Par Máximo |
850 Nm |
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Transmisión |
Cambio de marchas AMG SPEEDSHIFT MCT 9G |
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Aceleración 0-100 km/h |
3,2 segundos |
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Velocidad máxima |
317 km/h |
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Consumo energético combinado ciclo WTLP |
14 litros/100 km |
Diseño Interior del Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ 2025
El nuevo AMG GT G3 PRO tiene un interior mucho más refinado que el de la primera generación del modelo y se puede configurar como un 2+2 asientos sin coste adicional. Además, ahora ofrece mejor visibilidad y mayor sensación de amplitud. No obstante, haciendo juego con su estética exterior, mantiene cierta conexión con el motorsport.
Como no podía ser de otra manera, los materiales son de primera calidad y van perfectamente ajustados. En cuanto a ergonomía, los controles están muy orientados al conductor, algo que se agradece tanto dentro como fuera de circuito.
De entre los elementos que más llaman la atención están los asientos: vas sentado prácticamente en el suelo, pero el ajuste de la postura al volante ahora es mucho más fácil. Firmados por AMG Performance, tienen una sujeción lateral perfecta.
Otro punto a tener en cuenta es el volante AMG Performance de cinco radios hecho en cuero Nappa y Microfibra ‘MICROCUT’. Este, además de levas, lleva botones táctiles y el selector redondo para los modos de conducción, muy fácil de utilizar.
En la consola central, encontramos la pantalla vertical de 11,9” (la misma del SL con el que este coche comparte plataforma), que se complementa con la de 12,3” de instrumentación digital. Respecto al maletero, sigue ofreciendo una capacidad de 321 litros, bastante aceptable para un coupé deportivo de más de 4,7 m de largo.
Al volante del Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ 2025 en el Circuito de Ascari
Queda claro que las novedades más importantes del Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ 2025 están diseñadas para mejorar el rendimiento y la resistencia del superdeportivo tanto dentro como fuera de circuito. Pero la teoría no es nada sin la práctica, así que qué mejor plan que poner a prueba a este deportivo en el malagueño Circuito de Ascari (Ronda, España).
En principio el plan era difícil de superar: los pocos y privilegiados periodistas especializados allí congregados, procedentes de todo el mundo, daríamos cinco vueltas en cada tanda. La primera sólo de aclimatación, tres vueltas más alegres y una más pausada para refrigerar. Para clavar la trazada seguiríamos, según turno, a dos liebres de lujo: los pilotos alemanes Peter Ebner y Bernd Schneider, pentacampeón del DTM.
Todas las unidades contaban con Pirelli Cup 2R, semi-slicks específicos para circuito. Pero el día había amanecido cerrado y gris, y la inoportuna lluvia no lo iba a poner fácil a la hora de exprimir el coche. Al menos para mí que, aunque disfrute especialmente de la conducción en circuito siempre que puedo, no soy piloto profesional.
El trazado de Ascari, con 5,425 metros, es el más largo de España y quizá sea uno de los más técnicos también, con una pista muy rápida y ondulada que incluye hasta 26 curvas (13 a derechas, 13 a izquierdas). Ascari es incesante y, como bien nos adelantaron los ingenieros de AMG, pronto pudimos comprobar que es una gran pista para probar la dinámica del vehículo.
Acabada la primera vuelta para la toma de contacto con la sonrisa puesta, casi se nos ha olvidado que llueve, y nuestra liebre nos dice por el walkie que seleccionemos el modo ‘Race’ en el volante. Ebner es capaz de ir poniendo a prueba su coche mientras, pendiente de nosotros en todo momento, se ajusta a nuestro ritmo y nos da los mejores consejos. “no vas a notar ni que llueve”, me dice. Y así fue.
Es empezar a acelerar al V8 en la recta y los 10,9 segundos que anuncia el coche en el 0 a 200 km/h se hacen plausibles de repente, casi sin darte cuenta. Las mejoras aerodinámicas y tecnológicas que incorpora el Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ 2025 se notan cuando llegamos a nuestro límite en Ascari, hacia nuestra segunda tanda de vueltas siguiendo a Peter en solitario. Sobra decir que nuestro límite no tiene que ver con el del coche: él siempre pide más.
La estabilidad en curva, gracias a la combinación de la aerodinámica activa y la tracción total, es impresionante. El exquisito sistema de AMG desvía la potencia de forma inteligente a donde más se necesita, o directamente a la parte trasera si lo deseas.
En este caso, trabaja junto al control activo de la suspensión (de serie) para una estabilización activa del balanceo y un sistema de dirección de las ruedas traseras. Al atacar las curvas rápidas el coche parece adherirse con fuerza al asfalto, manteniéndose siempre en el camino exacto que le marcamos.
A pesar de las condiciones de lluvia, los neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2 R nos proporcionaron una sorprendente sensación de control total, incluso en las secciones más húmedas.
En modo "Race", el coche se siente tan ágil que casi parece estar leyendo tu mente, pero ya en el más básico los cambios de marchas son tremendamente ágiles, permitiendo exprimir al máximo el rango de potencia del motor V8 biturbo en cualquier situación.
La frenada es otro aspecto destacado, con los frenos cerámicos que no sólo ofrecen una eficiencia brutal, sino también una precisión que te permite modular la entrada a las curvas de manera eficaz, asegurando una trazada limpia y rápida. Vuelta a vuelta, el AMG GT 63 PRO mantuvo la compostura, e incluso al salir de las curvas más técnicas, donde el coche tenía que lidiar con cambios de elevación y asfalto mojado, la respuesta fue absolutamente imperturbable.
Cuando Peter me anuncia la hora de volver a boxes, con el agua cayendo cada vez con más fuerza, la adrenalina me salía por las orejas. Pero tocaba imponer razón a corazón, el sueño acababa y tocaba volver a la realidad. Al salir del AMG, se acerco, me felicitó por la progresión en cada vuelta y me preguntó qué tal. Emocionada, sólo recuerdo decirle: Madre mía, ¡qué coche!
Precio y conclusiones del Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ 2025
El Mercedes-AMG GT 63 PRO 4MATIC+ 2025 es, sin duda, uno de los superdeportivos más equilibrados y versátiles que he tenido la oportunidad de probar en los últimos años. Combina lo mejor de ambos mundos: la brutalidad de un coche de circuito con una mayor comodidad y facilidad de uso en carretera.
En condiciones exigentes, como las del circuito de Ascari bajo la lluvia, se mostró incansable, siempre demandando más y dando confianza al conductor, tanto en su capacidad de frenado como en la estabilidad en curvas y rectas rápidas.
Es un coche que hará las delicias de los clientes más exigentes, especialmente aquellos que pueden aprovechar algunos días en pista, donde se puede disfrutar más plenamente. El precio para esta maravilla aún no se ha fijado, pero cuando llegue al mercado, previsiblemente en la primera mitad de 2025, es de esperar que se ronde los 200.000 euros (el GT63 'normal' cuesta unos 170.000).
No obstante, la experiencia de conducción que ofrece, junto con su refinado interior y la posibilidad de configurarlo con un enfoque tanto práctico como deportivo, justifican cada euro. Un coche para los puristas, pero también para aquellos que buscan algo más que pura velocidad.
Los gastos asociados para acudir a esta presentación han sido asumidos por la marca. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas.
