La segunda generación del Peugeot 508 desvelada en el Salón de Ginebra ha supuesto toda una revolución para la berlina gala. En un segmento cada vez más denostado como es el de los sedán generalistas, la marca del león ha querido buscar la distinción con un marcado acento coupé y equipándolo con avanzada tecnología. Y tal y como ha sido la acogida del modelo, parece que no se han equivocado.
Pero, ¿cuál es el germen de nuevo Peugeot 508? En varios concepts de Peugeot encontramos la respuesta: desde el Onyx al Instinct pasando por el Exalt, todos aportan su granito de arena culminando en la nueva generación de la berlina francesa.
El Peugeot 508 2018 es el cenit tras años de desarrollo de Peugeot, no sólo en lo que toca al diseño, sino también en las innovaciones tecnológicas que los prototipos de la marca han ido mostrando estos últimos años. El punto de partida lo tenemos en 2012, cuando el Peugeot Onyx fue mostrando al mundo.
Peugeot Onyx: con él empezó todo
Este espectacular prototipo coupé fue uno de los primeros proyectos mostrados por el Peugeot Design Lab. Se trataba de un concept de mecánica híbrida, que combinaba un propulsor diésel 1.6 THP de 256 CV con un motor eléctrico de 88 kW (120 CV).
El propio Peugeot 508 ha prometido una variante híbrida para la familia, aunque donde encontramos las influencias es principalmente en el lenguaje de diseño. La berlina francesa inspira su línea en el Onyx, principalmente en ese frontal felino con afiladas ópticas frontales y un perfil igualmente afilado.
De una manera menos pasional se han materializado estas formas en el Peugeot 508, aunque estas ideas evolucionaron primeramente en otros dos prototipos que la marca ha presentado desde entonces: el Exalt y el Instict.
El Peugeot 508 se mira, y mucho, en el espejo del Exalt
El Peugeot Exalt se desvelaba en el Salón de Pekín de 2014: una berlina coupé, bastante más realista que el Onyx, pero sin dejar de mostrar un aspecto radical y propio de un prototipo. Al igual que el Onyx, el Exalt Concept también hacía gala de la propulsión híbrida que, combinando un motor diésel y otro eléctrico, ofrecía 340 CV de potencia combinada.
El diseño del Peugeot 508 mama directamente del Exalt, comenzando por la anchura de sus vías y siguiendo con los musculosos pasos de rueda. La impronta atlética del Peugeot Exalt se ha trasladado en el 508 para materializar esa imagen más deportiva del sedán, así como otros elementos como son las ventanas sin marco, o la banda oscura que une los faros traseros y que han empezado a incorporar desde entonces varios modelos de Peuegot lo que incluye al propio Peugeot 508 2018.
El habitáculo del Peugeot Exalt, también venía a anticipar al del Peugeot 508 y otros retoños del fabricante. El prototipo del león estrenaba los mandos Toggle Switches que, en el 508, también se ubican bajo la consola central imitando las teclas de un piano para gestionar diferentes funciones del vehículo. No obstante, el primer modelo de serie en estrenarlas fue el nuevo Peugeot 3008.
El avanzado puesto de conducción de tercera generación Peugeot i-Cockpit también se mostraba al mundo por primera vez en el Exalt y es uno de los principales reclamos del interior de la berlina francesa. Y es que en el Peugeot 508 parece que estemos ante un prototipo y no ante un modelo de producción, por esos tintes futuristas que encontramos en el diseño del volante o el pomo del cambio, así como en el cuadro de instrumentos digital.
El Peugeot Instinct y el Peugeot 508 SW
El último de los concepts que ha servido de antesala para la nueva generación del Peugeot 508 es el Instinct Concept. Este impresionante prototipo, presentado el año pasado en el Barcelona World Mobile Congress, fue desarrollado por Peugeot en colaboración con Samsung y su principal argumento era el arsenal tecnológico que traía bajo el brazo.
Todos los avanzados sistemas de conducción autónoma del Peugeot Instinct se escondían bajo una apariencia en desuso desde hace años en el fabricante galo: la carrocería shooting brake de cuatro puertas que compartieron anteriores exponentes como el Peugeot 504 Riviera de 1971 o el concept Peugeot 308 HDi Break de Chasse estrenado en 1998.
El diseño de la variante familiar del Peugeot 508, el recién mostrado SW, toma prestadas muchas líneas cinceladas en el Instinct y, según el fabricante, el diseño del concept fue clave para definir la estética del Peugeot 508 SW. Esta herencia se hace patente principalmente en la zaga que, aunque es menos inclinada que la del prototipo, si mantiene los voladizos cortos y los afilados faros que se extienden hasta los laterales.
Echando la vista atrás y analizando los tres prototipos, entendemos mejor de donde viene el radical cambio experimentado por el Peugeot 508 2018. Una apuesta de lo más acertada según avalan las críticas en general, aunque serán las cifras de venta quienes dicten finalmente sentencia.