Francia ha sido uno de los primeros países en Europa en considerar a los coches eléctricos chinos un peligro para la industria europea, y en especial para los fabricantes franceses.
Ahora ha pasado a la acción y ha aprobado una nueva norma de ayudas a la compra de un coche eléctrico, de hasta 7.000 euros, que deja fuera de facto a los coches fabricados en China y a cualquier coche fabricado fuera del continente europeo.
Para evitar discriminar directamente a las marcas chinas, Francia ha optado por basar sus ayudas en la huella medioambiental del coche, desde su fabricación hasta el concesionario, y no únicamente en sus emisiones de CO₂ cuando circula.
Esta nueva norma entrará en vigor en enero de 2024. Hasta ahora, la subvención por compra de 5.000 euros (hasta 7.000 para hogares con bajos ingresos) se concedía independientemente de la huella de CO2 del vehículo a lo largo de todo su ciclo de vida, pero a partir de ahora se examinará su eficiencia medioambiental.
"Sólo se tenían en cuenta las emisiones de gases de efecto invernadero durante el uso como criterio medioambiental. Sin embargo, este enfoque no permite apoyar a los vehículos más virtuosos, ya que no incluye las emisiones vinculadas a todo el ciclo de vida de un vehículo, desde su fabricación hasta su utilización en carretera", explica el Gobierno.
Cómo dejar fuera de las ayudas a los coches chinos sin nombrarlos
En la práctica, cada modelo vendido en Francia se verá asignado una puntuación medioambiental, que lo hará elegible o no para la bonificación. Esta puntuación se calculará en función del impacto ambiental de cada etapa previa a su utilización en carretera.
Se tendrán en cuenta los materiales utilizados en la producción (acero, metales ferrosos, aluminio, etc.), así como el impacto medioambiental del montaje (consumo de energía y mix energético, por ejemplo) y las baterías (peso, transporte, consumo de energía). También se examinará la logística, es decir, de dónde vienen las baterías y el propio coche. En conjunto, los coches deberán alcanzar una puntuación mínima de 60 sobre 80.
Así, un coche fabricado en China o en Texas no sería elegible para ayudas a la compra, independientemente de su precio de venta. Los modelos fabricados en China, como el MG 4 o el Tesla Model 3 Tracción Trasera que en la actualidad se pueden comprar con ayudas, se quedarían fuera.
El Dacia Spring, que se fabrica en China, podría también quedar fuera de la lista de coches elegibles para las ayudas a la compra. Aunque se rumorea que su peso pluma de tan sólo 1.050 kg compensaría el hecho que se fabrique en China y podría seguir beneficiando de ayudas a la compra.
Los modelos más beneficiados de esta nueva política de ayudas serían los modelos fabricados por grupos industriales franceses, como los Renault Zoe y Renault Mégane e-Tech fabricados en Francia, o los Opel Corsa-e, Citroën ëC4 o Peugeot e-2008.
El decreto y la orden que fijan los criterios medioambientales se promulgan hoy. Sin embargo, la lista de vehículos elegibles no se publicará hasta mediados de diciembre. Oficialmente, para dejar tiempo a la Agencia Francesa para la Transición Ecológica de examinar todos los coches en venta según una metodología "extremadamente rigurosa", asegura el Gobierno francés.
La medida será tachada de proteccionismo encubierto, porque en el fondo lo es, pero al mismo tiempo responde a una crítica hecha a menudo al coche eléctrico en la que si bien el eléctrico no contamina en la ciudad en la que circula sí lo ha hecho en otros lugares muy alejadas de nuestras ciudades (minería, fabricación). Y es que si bien económicamente puede tener sentido fabricar un coche en la otra punta del mundo, no lo tiene tanto a nivel ecológico.
Encuentra tu coche eléctrico ideal
Si te has planteado comprar un coche eléctrico, esto te va a interesar. Hemos creado el Recomendador personalizado de coches eléctricos en el que además de ver los modelos que se adaptan a tus necesidades también tendrás respuestas a las dudas que más te pueden preocupar como el precio, la autonomía o los puntos de carga cercanos.