El coche solar de Aptera está cada vez más cerca de entrar en producción, o eso asegura la compañía, gracias a las más de 22.000 reservas con las que cuenta y a una nueva ronda de financiación por la que ha obtenido 40 millones de dólares.
Particulares, empresas especializadas en tecnología e incluso universidades han hecho su aportación para que el futurista vehículo de tres ruedas, que promete hasta 1.609 km de autonomía, pueda dejar de ser un proyecto y hacerse realidad tras llevar gestándose casi dos décadas.
¿Las claves de su éxito? Principalmente son tres: su diseño, su tecnología y la autonomía que ofrece... además de su precio.
Cuando la realidad podría superar a la ficción, por menos de 25.000 euros
La primera vez que surgió el proyecto del Aptera, creado por Chris Anthony y Steve Fambro, fue en 2006. Por aquél entonces no funcionó, pero tras reformular las líneas maestras del diseño y la tecnología de su curioso vehículo eléctrico solar (SEV), la firma se relanzó en 2020.
Desde entonces, Aptera se ha movido bastante rápido. Mientras ha ido sometiendo al SEV a distintas pruebas de funcionamiento, el año pasado obtuvo 4 millones de dólares en fondos y recibió más de 7.000 pedidos anticipados (previa reserva de 100 dólares, que son unos 93 euros).
Hoy la empresa asegura que su libro de pedidos ya supera los 22.000 encargos, y la recaudación llega a los 40 millones de dólares. El éxito del Aptera (sobre todo en los EEUU) radica en tres claves.
Empezando por su diseño futurista y especialmente pensado para dos ocupantes, el Aptera es muy diferente al resto de opciones en el mercado: tiene tres ruedas, mide 4,36 m de largo, 2,23 m de ancho y 1,44 m de alto. Además, promete una capacidad de maletero de 708 l.
Otro dato a destacar es que posee uno de los mejores coeficientes aerodinámicos del mercado, con un Cx de apenas 0,13.
Por otra parte, el Aptera cuenta con dos variantes mecánicas: una versión de tracción delantera de 100 kW (136 CV) y otra de tracción integral cuyos propulsores rinden hasta 150 kW (204 CV) de entrega. El primero asegura una aceleración de 0 a 96 km/h en 5,5 segundos, el segundo hace lo propio en 3,5. En ambos casos, la velocidad máxima es de 177 km/h.
Al diseño y prestaciones se une su prometedora autonomía, pues hay hasta cuatro opciones de batería, de las cuales la más capaz (con 100 kWh) anuncia más de 1.600 km con una sola carga.
Esta puede hacerse como en cualquier vehículo eléctrico, pero lo que diferencia al Aptera de los demás es que, en muchas ocasiones, esto no haría ni falta: sus casi 200 células fotovoltaicas repartidas por todo el vehículo son capaces de cargar hasta 65 km de autonomía simplemente estacionado y un total de 72 km por día mientras circula.
Esto dependerá de factores como el tipo de conducción, los km que se recorran y las condiciones climatológicas, sí, pero es todo un hito para un SEV.
Si a todo esto le sumamos un precio que parte de los 25.900 dólares y llega a los 50.700 dólares - desde poco más de 24.100 euros al cambio a unos 47.200 euros-, tenemos los suficientes ingredientes para que se justifique el éxito que está teniendo el Aptera al otro lado del charco.
Es cierto que existen otros proyectos de coches solares que ya pueden solicitarse bajo reserva, como el Lightyear One o el Sion de Sono Motors, pero el Aptera lleva sobrada ventaja por el momento.
Y es que la compañía ha anunciado que el vehículo podría entrar a producción este mismo año.