Con el mercado de los coches solares en pañales y algunos fracasos como el de Sono Motors con el Sion, el coche eléctrico solar de Aptera sigue su rumbo y se encuentra en fase de validación.
En concreto, la compañía californiana está poniendo a prueba la aerodinámica de este poco convencional vehículo con forma de lágrima en el túnel de viento de Pininfarina.
Según explica la compañía, el diseño exterior de Aptera se inspira en la investigación del profesor Morelli, el mismo ingeniero detrás del famoso túnel de viento de Pininfarina.
Su diseño permitirá, según prometen, que el Aptera sea el coche con el mejor coeficiente aerodinámico del mercado, con un Cx de apenas 0,13. Este vehículo promete hasta 1.600 km de autonomía en su versión más alta y la capacidad de circular durante 64 km solo con la energía procedente del sol.
El siguiente paso en el proceso de pruebas de Aptera es construir unidades de validación Delta, que se probarán continuamente en túnel de viento y entornos del mundo real.
La edición de lanzamiento de este biplaza con tres ruedas, bautizada como Launch Edition, ya está lista para entrar en producción a finales de este mismo año con un precio que oscila entre los 25.900 dólares y los 44.900 dólares. Si la parte de financiación no se tuerce.
Lo cierto es que hay muchas promesas en torno al coche eléctrico solar, pero pocas opciones tangibles. El Lightyear One, un carísimo vehículo eléctrico solar que llegó con aires disruptivos, dejó de fabricarse al poco de entrar en la cadena de producción para saltar directamente a un modelo más asequible, pasando de costar 200.000 euros a cerca de 40.000.
Tampoco lo logró el Sono Sion por problemas de financiación.
Si los coches eléctricos se enfrentan a barreras como la recarga o el precio, con los vehículos solares se incrementan las dudas entre los potenciales compradores.