La Federación Internacional de Automovilismo sigue dispuesta a cubrir los Fórmula 1 lo antes posible. Tras deshechar el Halo de Ferrari y Mercedes y el Aeroscreen de Red Bull, la FIA ha vuelto a la carga con un proyecto de cúpula partida que, por el momento, Sebastian Vettel ha probado sin grandes resultados en los entrenamientos libres del Circuito de Silverstone.
En esta ocasión la fabricación del ya conocido como 'Escudo' ha corrido a cargo de la empresa italiana Isoclima, conocida por trabajar con categorías de automovilismo de primer nivel, descartando así que sea un equipo de la parrilla el que lidere la iniciativa. La intención inicial es tenerlo listo para introducirlo la próxima temporada 2018 y las labores de desarrollo van viento en popa.
Sin embargo, como sucedió desde las primeras pruebas de las protecciones la pasada temporada, los equipos y pilotos siguen mostrándose reticentes a su introducción. Christian Horner fue el primero en pronunciarse, antes incluso de que Vettel diese su opinión al respecto.
El director del equipo Red Bull cree que la FIA se está precipitando y que pensar en su implantación la próxima temporada podría suponer algunos peligros para los pilotos. A su parecer, sería mejor esperar a 2019 y asegurarse de que es totalmente seguro antes de tener que lamentar algún incidente.
"Hay bastantes preocupaciones con el tema. No estoy seguro que se haya probado tanto como se hizo con el 'Aeroscreen' y el 'Halo'. Yo trabajaría sobre este concepto adecuadamente para 2019 en lugar de precipitarnos en 2018. Estoy preocupado porque se va a utilizar sin haber tomado todas las medidas previas de forma correcta. Confiaremos en lo que nos digan los pilotos en cada circunstancia" Christian Horner.
Vettel se marea al probarlo
Sebastian Vettel fue el primer piloto de la parrilla en probar el 'Escudo' en los entrenamientos libres del Gran Premio de Silverstone. El equipo Ferrari montó en su monoplaza la semicúpula transparente con la que el alemán tan solo dio una vuelta de instalación.
Los 5,891 km que tiene el trazado británico fueron suficientes para que Vettel se sintiese ligeramente mareado a su parecer, por la curvatura que tiene el 'cristal'. Además el flujo del viento, que empujaba su cabeza hacia adelante, le dificultó aún más el paso por la recta de meta. Por lo que, aunque Ferrari tuviese programada una tanda completa con él, los de Maranello decidieron retirarlo antes de tiempo.
📽 If you missed it earlier... here's VET testing that new "shield" #BritishGP 🇬🇧 #F1 pic.twitter.com/nM8FWiQVrg
— Formula 1 (@F1) 14 de julio de 2017
"Lo intenté y me mareé un poco, la visibilidad hacia adelante no es muy buena. Creo que se debe a la curvatura, que distorsiona un poco lo que se ve. Además salía mucho aire de la parte de atrás de mi casco en la recta, y me empujaba la cabeza hacia adelante. Teníamos planeado hacer una tanda con él, pero no me gustó, así que lo quitamos" Sebastian Vettel.
Aún queda mucha temporada por delante para continuar con las pruebas pero, por el momento, el 'Escudo' no convence. Según parece, si el nuevo sistema no consigue la aprobación de los pilotos antes de que acabe el año, la FIA podría introducir de nuevo el Halo, que ya se desechó porque su presencia afectaba gravemente la visibilidad de los pilotos y no frenaba los impactos de posibles piezas que hubise sobre la pista.
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