No me canso de decirlo, el ritmo de carreras de la temporada 2014 del Mundial de Turismos, al menos en la parte europea de la mismo, es excesivo. Una cosa es que la Fórmula 1 dispute carreras cada dos semanas, pero que en ahora mismo se lleven celebradas ya siete de doce citas es demasiado. Eso sí, a partir de ahora, íremos a carrera por mes ya que el campeonato visitará Argentina para dar paso a la última parte de la temporada en Asia.
Pero vayamos a lo importante. El pasado fin de semana, Spa-Francorchamps acogió la séptima cita de la temporada con la misma tónica que el resto de la temporada: todo para Citroën. Los chicos de la marca de los dos chevrones únicamente dejaron un podio y fue Tom Coronel el "premiado".
El sábado, Yvan Muller, Sébastien Loeb y José María López copaban las tres primeras posiciones de la parrilla y casi de la misma forma acabaría la primera carrera ya que el francés se hacía con la victoria por delante de su compañero y líder de la clasificación, Pechito López. Loeb se tendría que conformar con la tercera posición del podio.
En la segunda carrera, las dos primeras posiciones se invertirían y sería el piloto argentino el que se alzaría con la victoria por delante de Yvan Muller mientras que Tom Coronel conseguiría el segundo mejor resultado de la temporada tras la segunda posición lograda en Austria.
En la general, José María López sigue líder con 255 mientras que Yvan Muller se ha acercado ligeramente y ahora está con 216 puntos. Loeb es tercero, con 190 puntos, mientras que el primer no-Citroën es Tiago Monteiro con 125 puntos.
