El fracaso estrepitoso de Red Bull en los primeros test de pretemporada, con apenas un puñado de vueltas a sus espaldas, ha hecho que en Renault salten las alarmas. En un par de semanas, la FIA cerrará el plaza para la homologación de los nuevos motores V6 Turbo. A partir de ese momento, no habrá posibilidad de realizar cambios por lo que, de contar con el peor propulsor de la parrilla, podría lastrar a sus equipos.
Para ello, Renault Sport F1 ha realizado cambios en su V6 Turbo, el Energy F1 y ya pudieron probarlo gracias a Lotus. Las mejoras han incluido cambios menores en el hardware, mejoras en la calibración y la correción de fallos en el software. Todas estas mejoras serán implementadas en la versión final del motor que los equipos podrán utilizar en los próximos test de pretemporada en Baréin.
El Lotus E22 ya contó con el nuevo propulsor en las dos jornadas promocionales (un test en toda regla camuflado de los ya famosos filming-day) de la semana pasada, y a pesar del escaso kilometraje realizado, estas jornadas están limitadas a 100 kilómetros, todo parece indicar que aunque sea en parte, Renault ha curado parte de sus males.
Vía | Racer.com
