Helio Castroneves logró una victoria fácil en una aburrida carrera en Texas Motor Speedway la noche del pasado sábado, donde tan sólo cinco coches acabaron en la vuelta del vencedor... sí, exactamente como en el GP de Canadá de F1 unas horas más tarde.
La victoria del brasileño de Penske se vio ensombrecida al revelar las IndyCar Series este martes que su coche presentó irregularidades técnicas en las verificaciones post-carrera en lo que respecta a aletinas en la parte inferior del Dallara DW12. Penske declaró que se trató de algo accidental, y el campeonato decidió sancionar económicamente (35.000$) y quitar quince puntos de "Entrant points" (importantes de cara a cobrar ayudas a los equipos), si bien no se tocaron los puntos de la general del campeonato, donde Castroneves ha logrado aumentar su ventaja como líder.
La victoria de Castroneves permitió además que tuviéramos el séptimo ganador en ocho carreras, si bien en el Top 5 encontramos a claros candidatos al título como Ryan Hunter-Reay (2º), Tony Kanaan (3º) y Marco Andretti (5º): son los cuatro primeros de la general. Entre ellos se situó además el especialista en óvalos Ed Carpenter.
Oriol Servià volvió a la competición con Panther Racing al volante del coche número 4, que irá rotando pilotos durante la temporada, de cara a probar candidatos para 2014. El catalán acabó 19º tras un trompo, un resultado final mucho más discreto que aquello a lo que podía aspirar. Tras retornar Ryan Briscoe en Milwaukee, Servià pilotará de nuevo para Panther en Iowa.
Esta semana la IndyCar no descansa y correrá en Milwaukee Mile, prácticamente la antítesis del rapidísimo óvalo de Texas.
Foto | IndyCar