La Fórmula 1 llega a uno de sus grandes premios más particulares, el Gran Premio de Singapur. El único que se celebra 100% bajo luz artificial (en Abu Dhabi la carrera comienza de día), un honor que el año que viene compartirá con el Gran Premio de Baréin. Pero en Singapur podrán decir que ellos lo consiguieron antes que nadie por obra y gracia de Bernie Ecclestone.
Pero si para algo puede servir Marina Bay en 2013 es para ver si Sebastian Vettel es capaz de mantener el dominio. El alemán ha ganado los dos últimos años y en su haber figura la victoria en tres de los cuatro últimos grandes premios. La combinación perfecta para pensar que el piloto de Red Bull puede salir de Singapur con más de medio título en el bolsillo.
El circuito
En 2013, Marina Bay sufrirá una pequeña reforma con respecto a años anteriores. La chicane de la curva 10, más conocida como Singapur Sling, desaparece, algo que no se aprecia en el mapa de la FIA pero que desde la página oficial de la FOM sí han advertido.
Una vuelta a Marina Bay con Fernando Alonso
El tiempo
Temperaturas altas y probabilidad de lluvia. Llega el otoño y como suele ser habitual en esa parte del planeta, el buen tiempo se mezcla con la lluvia a partes iguales. Un temido elemento si lo sumamos a la combinación noche y circuito urbano y eso que en años anteriores muchos de los pilotos de la actual parrilla lo han podido probar en sus carnes.
El previo de Pirelli
DRS
Como viene siendo habitual esta temporada, durante el gran premio los pilotos contarán con dos zonas de DRS. La "novedad" (ya que no se ha repetido a lo largo de la temporada) es que cada zona contará con una zona de detección. Quizás en la ubicada en la línea de meta los pilotos no puedan sacar demasiado partido pero en la segunda, que comprende desde la salida de la curva 5 hasta el Memorial Corner, si que propiciará muchas maniobras.