La incertidumbre que atormenta al piloto francés en estos momentos no debe ser nada buena para afrontar el resto de la temporada. Más allá de que la escudería Toro Rosso haya confirmado a los pilotos Daniil Kvyat y Max Verstappen para la temporada 2015, lo que más preocupa a Vergne es la probable imposibilidad de mantenerse en la Fórmula 1 sin el apoyo de Red Bull.
Los antecedentes, en los casos de Sébastien Buemi, Jaime Alguersuari y Robert Doornbos, entre otros, quienes tuvieron una participación fugaz en la categoría, deben tener pensando a Vergne. Una vez fuera de la órbita Red Bull, las puertas parecen cerrarse en todas las alternativas. Aunque también se debe decir que el francés ha sido afortunado, en muchos sentidos, pues completará tres temporadas en la Fórmula 1 cuando un gran número de pilotos del programa Red Bull, como Neel Jani, Tom Dillmann, Mirko Bortolotti, Filipe Albuquerque, António Félix da Costa, Jean-Karl Vernay y Daniel Juncadella; se quedaron con las ganas de ascender a pesar de sus promisorias trayectorias en las categorías inferiores.
En la cuenta Twitter de Jean-Éric Vergne se puede leer:
Me estoy enfocando ahora en un gran final de temporada. Y ya estoy trabajando para estar en el 2015 en la fórmula 1. Sé que aún tengo mucho por demostrar. No hay resentimientos. Toro Rosso es una buena escuela, aprendí mucho... Pero después de tres años juntos tendremos que ir por caminos separados cuando culmine esta temporada.
Tal vez parezca injusto, pero si se analiza el funcionamiento del programa Red Bull en el equipo Toro Rosso se cae en cuenta que Vergne suma 50 participaciones, Sébastien Buemi tiene el mayor número de carreras con 55, y sus números no resultan particularmente brillantes si se comparan con otros ex pilotos del equipo de Faenza. En Red Bull es todo o nada hoy, no hay tiempo para pensar en mañana.
Vía | nextgen auto