A todos nos gusta el Corvette, ese deportivo tan asociado a la cultura del motor americana, siempre tan fiel a sus principios... hasta ahora. Según Car and Driver, es probable que la octava generación del Vette rompa con 63 años de tradición e introduzca el que puede ser el mayor cambio en toda su historia.
En lo que podría ser una jugada más que arriesgada, el fabricante americano tendría muy avanzado el desarrollo de una nueva plataforma en la que el motor de ocho cilindros iría colocado en otro sitio, y no en un Defender como el del otro día, sino en posición central, detrás de los ocupantes. ¿Cómo se te queda el cuerpo?
El propulsor rondaría los 500 caballos como el actual, pero estos cambios estarían enfocados a prepararse para la llegada el E-Ray en 2020, con dos motores eléctricos acoplados en las ruedas delanteras para conseguir un sistema híbrido de tracción total.
GM no quiere quedarse atrás en su lucha contra otros pesos pesados del mercado de los deportivos, pero si se descuidan van a llegar tarde a la fiesta. Ahora la pregunta es: ¿cómo se van a tomar este cambio los defensores del Corvette? 2017 puede ser un punto de inflexión en la historia del deportivo americano más genuino.
Vía | Carscoops
