Si el Alfa 147 ya es uno de los compactos más bellos del mercado, si le añadimos la variante Blackline (que también disfruta el Alfa GT), nos encontramos ante algo claramente superior a la media.
No recibe ninguna mejora mecánica, simplemente son cambios estéteticos, pero que cambios. Las nuevas llantas, de 18 pulgadas, alojan en su interior unos discos de freno oscurecidos, aumentando la sensación de deportividad, que sumada a la inclusión de los retrovisores cromados, el techo en negro y un pequeño alerón trasero. No es un Alfa 147 GTA en términos mecánicos, pero a más de uno le valdría.
Las dos versiones restantes, Collezione y Sportiva, no muestran tantos cambios, pero también se agradecen. La primera, la más baja de la gama, incluye llantas de 17’’ e instrumentación en cuero, mientras que la Sportiva recibe llantas de 17’’ y mejoras en el apartado dinámico, como el chasis y la suspensión.
Vía | Diariomotor
En MotorPasion | Alfa GT edición especial Blackline