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HOY SE HABLA DE
Lo que vemos aquí puede ser la representación real de una de esas frases que definen el mundo del tuning, puedo pero no quiero, porque a ver, si hacemos cuentas, entre carrocería, llantas Bling Bling, calandra Bling Bling y algún que otro arcesorio más, casi que le salía más rentable comprar un Chrysler 300C nuevo.
Porque hay que decir, que las tripas de lo que véis ahí, provienen de un Renault Laguna de la anterior generación. Y no, no véis mal, tiene matrícula española…
Vía | Historias del Motor