Más allá de hacer coches, el CEO de Toyota quiere que sus trabajadores "apaguen el ordenador y disfruten"

Más allá de hacer coches, el CEO de Toyota quiere que sus trabajadores "apaguen el ordenador y disfruten"
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Desde que llegó al cargo en 2009 el CEO de Toyota, Akio Toyoda, ha ido reforzando la comunicación con sus empleados y, además de realizar diversos eventos cada año para ellos, paulatinamente les envía mensajes para fortificar “la filosofía Kaizen” japonesa o de mejora continua.

Recientemente, Toyoda ha querido mandar un mensaje de año nuevo muy especial para todos sus empleados y les ha hecho algunas peticiones de lo más curiosas.

Además de pedir a su plantilla que se muestre “positiva y optimista” de cara a este año respecto a la pandemia, Toyoda ha pedido a sus empleados que aprendan algo nuevo, que establezcan relaciones con otros colegas de trabajo y, por último, “que apaguen el ordenador y disfruten”.

Peticiones inusuales con un trasfondo fundamental

Toyota

Pese a la pandemia mundial ocasionada por el COVID-19 y sus múltiples variantes, 2021 ha sido un buen año a nivel global para el conglomerado de Toyota, que por el momento es la empresa de automoción más grande a nivel global.

De hecho, en palabras del propio CEO “quedará registrado como el segundo año con mayores ventas globales de nuestra historia”. Según los datos que pueden apreciarse en la web internacional de la marca, estas cifras rondarían unas ventas totales de entre los 10.742.122 vehículos que vendieron en 2019 y los 10.593.698 de 2018, pero no se especifica el dato concreto para 2021.

Por eso su presidente comienza el mensaje de año nuevo felicitando a sus empleados (no solo los de Toyota, sino también los de Lexus, Daihatsu e Hino) por su “increíble capacidad de adaptación, con la que continúan asombrándome un año más”.  Con un tono de lo más cercano, familiar y personal, Toyoda afirmó que aunque es más que posible que no estemos ante el final de la pandemia, “nos acercamos a su final con cada día que pasa”, e hizo dos tipos de peticiones a su personal: unas más a nivel general y otras más a nivel personal.

Toyoda pide a sus empleados que se comprometan a aprovechar 2022, les solicita que sean positivos, optimistas y agradecidos y, a nivel personal, les pide “que hagan tres cosas por él este año”: aprender algo nuevo, establecer relaciones con otros colegas… y apagar el ordenador.

En cuanto a la primera petición, cualquier ejemplo es válido “siempre que no se haya hecho antes”, en cuanto a la segunda, además de que la comunicación entre colegas es necesaria para el fortalecimiento de la empresa creando comunidad, pretende rebajar la presión y que cada empleado sea consciente de que no está solo: “Comuníquese con un colega de Toyota o Lexus en otra región, incluso en el otro lado del mundo. Aprenda cómo ellos abordan los mismos desafíos que usted puede tener”, recalca.

La tercera petición de Toyoda es la que más sorprende a este lado del charco: “apague su teléfono móvil, cierre el ordenador y ¡diviértase muy merecidamente!”. Para terminar su mensaje de año nuevo, Toyoda no se olvida de recordar a sus trabajadores “cuánto les aprecia” y les pide que se cuiden y se mantengan a salvo.

Teniendo en cuenta que la filosofía japonesa es muy diferente a la nuestra, para los empleados de Toyoda estas peticiones tan personales además de ser de lo más sorprendentes, seguramente sean palabras con cierto efecto medicinal, pues Japón cuenta con la tasa de suicidio más elevada del denominado G7 (los países más avanzados del mundo a nivel económico: Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido).

De hecho, en Japón cada año hay miles de víctimas mortales por exceso de trabajo o “karoshi”. Este problema social tan arraigado en Japón, que conlleva compensaciones económicas para las familias de las víctimas por parte de sus corporaciones, está reconocido desde hace décadas.

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