Conocer la normativa de tu país es importante, o puedes acabar gastándote más de 100.000 euros para nada. Este británico ha aprendido la lección por las malas: ha importado una Tesla Cybertruck a Manchester y poco le ha durado en el garaje.
La mole eléctrica de Elon Musk es ilegal en Reino Unido como también lo es en Europa: ni allí ni en el continente ha sido homologada. Se considera un riesgo potencial para peatones, usuarios vulnerables o incluso otros coches. Por eso no se vende a este lado del charco ni seguramente lo haga nunca.
La Cybertruck no está homologada para circular en Europa, incluyendo Reino Unido
El pasado miércoles, agentes de la Policía del Gran Manchester (GMP) detuvieron a un conductor que iba a los mandos de una Tesla Cybertruck. Su unidad en cuestión era si cabe aún más llamativa que la estándar: tenía los paneles de acero inoxidable pintados en negro mate y en el frontal lucía la denominación Cyberbeast en rojo. Sumado a su enorme tamaño, casi 6 m de ancho y más de 2 m de ancho, no pasó desapercibida para los oficiales.
Como se puede adivinar por su nombre, la Cyberbeast es la versión más bestia de la pick-up de Tesla. Y también la más cara. Ahora mismo se ofrece por 100.000 dólares, pero por ejemplo en variante de lanzamiento Foundation Series arrancaba en casi 120.000 dólares. Es decir, que para hacerse con la pick-up eléctrica este propietario fallido se dejó entre unos 97.000 y 123.700 euros al cambio actual, a lo que se añade la personalización y los costes de importación. Una inversión, a todas luces, nefasta.
Sin certificado de conformidad. Tras darle el alto y comprobar que se trataba de una Cybertruck, los agentes procedieron a denunciar al conductor por circular con un vehículo no homologado. Y tal y como se exige en el artículo 165 de la Ley de Tráfico británica, también se le requisó la pick-up de Tesla.
La policía de Manchester detalla que el coche "está registrado y asegurado en el extranjero" (se entiende en EEUU) pero que "no está homologado para circular en el Reino Unido, por lo que no tiene certificado de conformidad".
Este último documento (COC, por sus siglas en inglés), lo debe emitir el fabricante y certifica que un coche cumple con la normativa, estándares técnicos de seguridad y medioambientales establecidos por la Unión Europea.
Si bien Reino Unido tras el Brexit no pertenece a la UE, las normas de tráfico siguen armonizadas con las europeas. De hecho es uno de los países en los que se admite el canje del permiso de conducir europeo. Por tanto, los coches importados deben tener ese certificado, que a su vez se obtiene si consigue aquí la homologación.
La Tesla Cybertruck nunca se podrá vender en Europa, por peligro potencial. Tesla no lo ha tramitado la homologación en Europa y posiblemente no lo haga nunca. Esencialmente, por su fisonomía. La regulación europea exige un redondeo de 3,2 mm en las partes salientes y las aristadas formas de la Cybertruck la conforman placas de acero de 1,4 mm.
Además, tras las pruebas de choque estadounidenses, los reguladores europeos han mostrado su preocupación por lo poco que se deforman sus paneles. Esto significa que la energía del choque se repercute en los ocupantes de la propia Cybertruck o bien en otros vehículos si los hay. Como ejemplo, este Nissan Sentra que quedó con el frontal reventado tras chocar con una Cybertruck en un cruce, mientras que la pick-up eléctrica apenas mostraba daños.
Así, la Cybertruck se considera un riesgo potencial para peatones y usuarios vulnerables, porque sus bordes pueden actuar como cuchillas si atropellan a un peatón o ciclista, cuyo cuerpo es el que absorbe el golpe. Pero también para otros vehículos debido a la dureza de sus paneles.
Para poder homologar la Tesla Cybertruck en Europa, Tesla debería rediseñar los paneles de su pick-up, redondeándolos, y por tanto modificar su proceso de producción. Pese a que el mercado de las grandes pick-up se ha incrementado en Europa, lo que provoca la preocupación expertos en seguridad vial y ecologistas, sigue siendo un mercado de nicho: a Tesla no le sale a cuenta semejante inversión.
Más si cabe con la Cybertruck, que se está vendiendo por debajo de lo esperado en su natal EEUU, donde sí es legal. De ahí la agresiva campaña de descuentos y rebajas que lleva meses aplicando la firma de Elon Musk. Desde su lanzamiento, la Cybertruck ha sufrido siete llamadas a revisión en poco más de un año de estar a la venta.
Yes, we are highly confident that Cybertruck will be much safer per mile than other trucks, both for occupants and pedestrians https://t.co/RydoYYn4FU
— Elon Musk (@elonmusk) December 5, 2023
Por otro lado, equiparla con paneles más gruesos aumentaría el peso de esta mole, que en el caso de la Cyberbeast ya para la báscula en las 3,1 toneladas. Lo que significa que rebasaría los 3.500 kg con estas modificaciones y ya no podría conducirse con carnet B de coche.
Se señala que aunque este vehículo tiene en regla la propiedad y el seguro, al no estar homologado y no disponer del certificado de conformidad, no podrá circular. Seguramente su dueño la recupere, pero no podrá sacarla del garaje. La única solución que tiene es venderla, si no quiere perder toda la inversión, o bien mudarse a EEUU.
Lo mismo le ocurrió a un propietario belga, que se convirtió en el primer europeo en comprarse aquí una Cybertruck. Pero tras tenerla en sus manos descubrió que no estaba homologada aquí y ha tenido que deshacerse de ella. "En cualquier lugar con policía me arrestarían". Es decir, en cualquiera de las carreteras de países europeos, lo que se aplica también a Reino Unido.