A Elon Musk no le faltan ideas. Unas son acertadas, algunas son ejecutadas de manera brillante y en el caso de algunas otras, se las podía ahorrar. Pero en todas ellas hay una constante, el odio a los atascos y al transporte público. Su idea para solucionar lo primero sin recurrir a lo segundo pasa por usar sus coches, ya sean los Cybercab autónomos y biplaza o bien conduciendo los Tesla en túneles bajo la ciudad gracias a los túneles de The Boring Company.
Con The Boring Company y su red de túneles bajo Los Angeles, básicamente, Elon Musk quiso reinventar el metro, sin usar trenes y que fuese reservado para los Tesla autónomos. En California le dijeron que ni en sueños. Así, el resultado es un túnel bajo el Centro de Convenciones de Las Vegas en el que no paran de colarse gente.
De querer ser disruptivo a ser un mero servicio de taxi-lanzadera
Entrar sin autorización en el sistema de túneles se ha convertido en un quebradero de cabeza para la Boring Company, que construyó y explota el túnel de 3,8 kilómetros conocido como The Loop (El Bucle).
Según Fortune, desde 2022 ha habido al menos 67 casos de allanamiento. Y desde principios del año pasado, 22 coches han seguido a los Teslas hasta las estaciones o túneles, según informes de The Boring Company.
La mayoría de los coches que intentan entrar en los túneles lo hacen por error de sus conductores, que siguen a los Tesla pensando que ellos también salen del centro de convenciones o que entran a él. En todo caso, sólo uno ha logrado circular por los túneles.
Pero hay toda clase de gente que entra a curiosear, a dormir e incluso algún que otro skater que, viendo esos túneles inmaculados, se habrá imaginado que eso debía ser mil veces mejor que un halfpipe o ser la madre de todos los skate park.
El aspecto de The Loop es muy futurista, no se le puede quitar eso y explicaría la curiosidad que despierta, pero dista mucho de ser el sistema disruptivo que Musk esperaba construir inicialmente con su empresa de excavación de túneles.
Si es que algún día realmente quiso que funcionase, no olvidemos que creó el Hyperloop únicamente para torpedear la construcción de una línea de alta velocidad en California.
La propuesta de The Boring Company es a día hoy un servicio privado, bajo las instalaciones del Centro de Convenciones de Las Vegas y que funciona como un servicio de lanzadera efectuado por Teslas, dando trabajo a 204 conductores. Si bien permite evitar los atascos de la zona, reduciendo un trayecto de 45 minutos en horas punta a un puñado de minutos, estamos lejos del sistema futurista.
Eso sí, según las estadísticas obtenidas por la revista, The Boring Company ha transportado a más de 2 millones de pasajeros entre junio de 2021 y noviembre de 2023. Y aunque no ha logrado implantarse en otras ciudades, planea expandir su red bajo Las Vegas, su único cliente hasta el momento.