'Porsche Desing Tower' es el nombre de una obscenidad arquitectónica y residencial dirigida a un público objetivo muy concreto. Con la exclusividad como bandera, esta torre de casi 200 metros de altura y 60 pisos inaugurada en 2017 descansa sobre Sunny Isles Beach, en Florida. Un elevador estaciona en el interior del apartamento el vehículo del propietario, aunque vivas en el piso 57.
En declaraciones a El País del promotor del rascacielos y socio de Donald Trump, Gil Dezder, es, en definitiva, "un edificio pensado para los locos de los coches".
De la calle al sofá sin bajarte del coche
Tal y como describe su página web, su estacionamiento robótico es el sueño húmedo de cualquier amante de los coches y la buena vida, todo sea dicho. Cuenta con 284 plazas, que pueden albergar hasta 132 vehículos que ascienden y descienden a su antojo a través de tres grandes ascensores acristalados en la espina dorsal del gigante.
El viaje en el ascensor no lleva más de dos minutos y la velocidad acaba por taponar los oídos.
Los residentes pueden así optar por subir directamente a su apartamento sin pisar la calle, ya que el garaje está integrado en el propio piso. Desde la sala de estar se puede observar el objeto de deseo a través de una pared de vidrio, algo muy parecido a este complejo de apartamentos en Melbourne, aún un proyecto pero con el que se nos hace la boca agua.
El edificio tardó tres años en construirse y costó más de 400 millones de dólares. ¿El precio de los apartamentos? Se estima que cada uno parte de los 6 millones de dólares, excepto el ático, que sigue a la venta por 32 millones.
No hace falta decir que, a parte de este sistema de aparcamiento, la Torre Porsche cuenta con spas, restaurantes, cines, peluquerías, golf virtual y cualquier extravagancia que se te pueda venir a la cabeza,
Es mejor que no veas la comprobación que hizo la cadena CBS Miami de este sistema de aparcamiento. No lo hagas.
Y este tampoco.