La pesadilla de desabastecimiento que se está viviendo en Reino Unido derivada de la falta de transportistas podría suceder en España. Así lo alertan las patronales del transporte por carretera en nuestro país, que señalan la preocupante carencia de conductores, pero también otras causas.
Según afirma la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), estiman que, en solo tres años, España necesitará 15.000 camioneros nuevos pues la plantilla está envejecida.
Por su parte, la Federación Gallega de Transportes de Mercancías (Fegatramer), advierte de que el transporte de mercancías en nuestro país "transita al borde del precipicio" y no solo por la falta de conductores, sino también por las políticas actuales, la crisis derivada de la pandemia y por males que ya son endémicos en el sector. Hablan de tormenta perfecta.
Más conductores jóvenes, que no llegan
En nuestro país, la edad media de la plantilla de transportistas es de 50 años. Y lo preocupante es que no se está produciendo un relevo generacional. Así, lo ha afirmado el secretario general de la CETM, José María Quijano, en una entrevista concedida al El Confidencial Digital.
Y en la misma señala que cosa de tres años, España necesitará 15.000 profesionales de transporte, siendo vital el interés de las jóvenes generaciones. Lo que a juicio de Quijano, se antoja complicado.
"Las nuevas generaciones no son tan dadas a la movilidad y al tener que estar fuera de casa. Esto provoca que mucha gente no esté dispuesta a subirse a un camión y estar fuera de casa y lejos de su familia", explica a este medio.
Así, consideran que las administraciones deberían impulsar este interés, por ejemplo subvencionando la obtención de este permiso. En este sentido, recientemente se ha reformado la normativa para que se pueda obtener el carnet para conducir camiones y autobuses a los 18 años y no a las 21 o 24 como ocurría anteriormente.
La DGT presumió, de que así se atendía a una demanda histórica por parte de la CETM, pero desde el sector la consideraron insuficiente.Y es que por ejemplo la rebaja de edad viene condicionada a que se realice el CAP ordinario (280 horas), cuando la mayoría de los cursos que se imparten en España son de la modalidad acelerada (140 horas).
Así, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) ya criticó que la medida no ayudará a impulsar la llegada de nuevos conductores pues tendría mínimo impacto.
Malas condiciones laborales y políticas que no favorecen el transporte por carretera
Por su parte, desde Fegatramer, consideran que la falta de conductores se deriva de problemas también estructurales. Por ejemplo, la situación de la empresas de transporte que no pueden asumir salarios dignos para una profesión que es tan dura como exigente. Lo que se ha agravado con la crisis de la pandemia.
De hecho, a las largas horas al volante y fuera del hogar, se suma por ejemplo que en general son los camioneros los que realizan las labores de carga y descarga de la mercancía. Fegatramer considera que se trata de un abuso y que debe prohibirse y regularse. Y según la CETM, es una de las principales causas que desincentivan el empleo en el sector.
También exigen que se actualicen las medidas de salud y de seguridad laboral y que se adecue la formación profesional a las nuevas necesidades del mercado y las empresas, así como la mejora de las prácticas y que no supongan una carga para las compañías.
No obstante, la patronal gallega considera que más allá de la falta de conductores, el sector se está topando de frente con otras carencias y trabas coyunturales.
Los efectos de la pandemia, la subida de la electricidad o el combustible (habla de precio desorbitado del gasóleo) o las tasas e impuestos están ahogando en su opinión a las empresas del sector del transporte público de mercancías.
También critica los futuros peajes en autovías que se están proponiendo: ya el sector amenazó con movilizaciones si no se les incluía entre las excepciones. Sea como fuere, demandan al Gobierno que las decisiones se consensuen con el sector.
A ello se suma la obligatoria renovación del parque de vehículos, a rebufo de las exigencias medioambientales, y critican que las administraciones pretendan jubilar en 20 años cerca de 400.000 camiones sin un plan alternativo para movilizar el 90 % de las mercancías que se transporta actualmente por carretera en España.
Por otro lado hablan de constante estigmatización. Por ejemplo la reciente liberación de los peajes en varias autopistas, que ha supuesto una mayor ocupación de vías, como es el caso de la AP-7. Y la solución impuesta ha sido la prohibición de circulación para los camiones los domingos sin considerar que la medida afecta al suministro.
Con todo esto en la mano, el sector considera que si no se toman medidas urgentes y prácticas, la acuciante carencia de conductores no será el único problema, si no la falta de empresas de transporte, amenazadas por estos motivos, así como la de los propios vehículos.
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