La Unión Europea no solo quiere híbridos y eléctricos menos silenciosos, también quiere que los coches tradicionales reduzcan su ruido para aligerar la contaminación acústica. Puede parecer contradictorio, pero tiene su sentido.
A partir de 2016 comenzarán a verse los cambios en los turismos de nueva homologación. En 12 años desde hoy se pasará de 74 dB a 68 dB, aunque se podrá llegar a 77 dB en el caso de coches más potentes. Para entender estas diferencias hay que conocer el significado de la magnitud del decibelio.
Para no hacer aquí una larga exposición matemática, lo resumiré en que es una magnitud logarítmica, como la escala de Richter para los terremotos. Un coche que emite 70 dB por el escape es diez veces más ruidoso que uno que emite 60 dB, o cien veces más ruidoso que uno que emite 50 dB.
Para hacernos una idea, 70 dB es el ruido que genera una aspiradora, 60 dB un lavaplatos. Si al final van a dar la razón a los que dicen que los coches modernos son como los electrodomésticos. Futuras etiquetas informarán a los consumidores del ruido de escape que hará su coche, como pasa hoy con los neumáticos.
La segunda y tercera fase entrará en vigor en 2020 y 2024. Cada fase afecta a los coches fabricados dos años después de su introducción. No es lo mismo homologar un modelo que fabricar x unidades del mismo. Ahí están los matices. No se habla de silenciar escapes con carácter retroactivo.
Los habituales del Jarama sabrán que hay una limitación de ruido de 90 dB que no se puede exceder salvo en ocasiones muy puntuales. Esto nos ayuda a pensar en lo que implica un escape libre, sin silenciador, que puede superar esa magnitud. Es comparable al ruido del tráfico denso, pero con un solo coche.
En los últimos años venimos observando cómo el sonido de los coches pierde carácter, intensidad y hasta belleza. La masiva adopción de turbocompresores no está haciendo mejores sonidos de escape, y ya como hablemos de reducción de cilindros, se puede empeorar el problema (visto como entusiasta).
Por otro lado la contaminación acústica es el origen de muchos trastornos de salud, y a fin de cuentas se trata de eso, de salud pública. No estamos circulando solos por una carretera desierta como la de los anuncios de la tele. De ahí que sea razonable bajar estos ruidos. En camiones bajarán de 81 a 79 dB.
Ahora vemos como una aberración el sonido amplificado de interior de coches deportivos "como el BMW M5":https://www.motorpasion.com/videos-de-coches/bmw-m5-diferencias-entre-sonido-amplificado-y-no-amplificado. En el futuro la limitación de ruido de escape hará más necesarios esos sistemas. Parece justo, el que quiera oír ruido, que lo oiga el solo sin implicar a los demás.
Vídeo | "Vimeo":http://vimeo.com/64056728 Fuente | "Parlamento Europeo":http://www.europarl.europa.eu/news/es/news-room/content/20140331IPR41178/html/El-Parlamento-Europeo-endurece-el-l%C3%ADmite-de-ruido-de-los-veh%C3%ADculos