A estas horas los mecánicos de Lotus deben estar reconstruyendo, sobre un nuevo chasis, el E22 que Pastor Maldonado destrozó durante las prácticas libres del Gran Premio de Singapur. El piloto venezolano perdió el control de su monoplaza y se estrelló contra la pared exterior de la curva 10, sin sufrir consecuencias físicas, pero su coche quedó muy dañado, lo que le impidió proseguir en la sesión. Sin embargo, desde Lotus aseguraron que el E22 con el número 13 estará listo para la clasificación de mañana.
Es la enésima vez que Maldonado colisiona, una situación preocupante porque la tendencia a estrellarse le ha hecho ganar una muy mala fama en la Fórmula 1 y, aunque ciertamente el Lotus E22 no corre ni en bajada, el piloto tiene que enfocarse en realizar el mejor trabajo posible, desde el punto de vista profesional. Maldonado debería mirarse en el espejo de Andrea de Cesaris, quien no pudo disputar el Gran Premio de Holanda de 1981 porque los mecánicos de McLaren se negaron a reparar su coche, obstinados por la falta de consideración del piloto para con el personal de la escudería.