El pasado fin de semana, con motivo del Gran Premio de Brasil, Mark Webber quiso utilizar una decoración especial para el que iba a ser su último gran premio en la Fórmula 1. El australiano, poco dado a cambiar de diseño en su casco simplemente colocó una cruz blanco sobre un fondo negro a la altura de la boca. ¿Un mensaje encubierto de que no le dejaban hablar?
Pero más allá de elucubraciones, en la jornada de ayer, Webber sí que vivió un momento de "censura". En su página web, Mark Webber publicó una carta de despedida en la que Red Bull y alguno de sus componentes no quedaba bien del todo. Misteriosamente, unas horas después esa carta de despedida salía editada sin referencia alguna a las partes polémicas.
Los puntos más polémicos fueron los referidos a Sebastian Vettel y Helmut Marko. Webber sobre todo se muestra crítico en el caso del director del Red Bull Junior Team ya que desconoce su papel dentro de la escudería.
Ha pasado tanta agua bajo el puente entre nosotros, que en nuestra relación resulta más difícil pensar en la parte positiva que en la negativa, así que ha sido una decepción, porque quieres mantener una opinión respetuosa de todo el mundo, les das tantas oportunidades como puedes, tanto como sea posible. Creo que han pasado muchas cosas entre nosotros. Quizá cuando tengamos más de cincuenta años será diferente, pero tras lo que ha ocurrido entre nosotros es difícil hacer borrón y cuenta nueva. Por supuesto, no me importa nada, y a él tampoco. Así son las cosas
Todavía no tengo claro su papel en el equipo, así que… Fue muy crítico conmigo desde el primer día, pero al final fue él quien trajo a Sebastian y ha hecho un gran trabajo con ello. Quizá está decepcionado por el hecho de que los equipos de Fórmula 1 tengan que tener dos coches. Pero así es
Pero no todo van a ser golpes. El australiano afirma que ha sido un placer trabajar con Adrian Newey, algo que le ha ayudado a comprender los monoplazas y a saber transmitírselo. También tiene unas últimas buenas palabras para Red Bull ya que a pesar de su contrato, le permitirán incorporarse a la disciplina de Porsche antes de que finalice el año contrariamente a lo que se había anunciado con anterioridad.