Llegados a este punto del año, muchos de nosotros pasamos por una pequeña crisis provocada por la última ola de frío o temporal. Hace frío, por fin, y los tiempos en los que nos podíamos permitir bajar las ventanillas quedan lejos, muy lejos. Sin embargo, pese a lo que pueda parecer, el invierno no tiene porqué ser una época en la que sufrir en el silencio de una manta y un café. Disfrutar de la conducción, salir ahí fuera, explorar y aventurarse a conocer nuevos lugares debe ser siempre una opción.
No importa el vehículo que tengas aparcado ahí abajo, al lado de la panadería, o en el garage de la comunidad. Tanto si conduces un Toyota GT86 como si siempre te ha atraído más el off-road, hay una ruta para ti este invierno. La temperatura, por desgracia, la sentimos cada persona de forma distinta por lo que os daremos dos tipos distintos de rutas. Unas enfocadas a los que os gusta sentir el aire fresco en vuestra piel y otras para los que preferís cerrar los ojos al sol mientras tomáis café.
Para explotar el invierno
Parque Nacional de Los Picos de Europa. Es una de las joyas indiscutibles de la península Ibérica con un paisaje sorprendente y hogar protector de la naturaleza más salvaje. Allí es, por ejemplo, uno de los exclusivos lugares en los que aún existen osos pardos. Desde Riaño, Oviedo, Ribadesella o cualquiera de las poblaciones cercanas son numerosas las rutas a elegir. Rodear el parque nacional te llevará unos 180 km pero lo cierto es que sería una pena no parar a admirar esos paisajes o tomar caminos más secundarios. No es la primera vez que algún extranjero queda prendado de aquellas carreteras convirtiéndose en su zona favorita de curvas.
Valles, verde y costa en Euskadi. No muy lejos de nuestro anterior destino, Euskadi ofrece una oferta interminable de destinos para todos los gustos. El Parque Natural de Aizkorri-Aratz no es sólo un paraíso natural en verano sino que en invierno se convierte en ese pequeño destino para desconectar y, quizás, disfrutar de la nieve sin aglomeraciones. Si lo que quieres es asfalto, la carretera de la costa es otro de los lugares imprescindibles. Explorar la zona de Bilbao hasta Bermeo nos llevará menos de una hora y media de modo que, si resides en la capital -vasca- vizcaína, esta ruta puede ser tu pulmón extra para el fin de semana. Por si fuera poco ha sido una y otra vez hogar de presentaciones internacionales por la calidad de sus carreteras.
Sierra Nevada, en el sur también hay nieve. Si eres amante de los deportes de invierno o simplemente prefieres un rato en la montaña que en cualquier otra parte pero vives en el sur, no desesperes, Sierra Nevada es tu destino. Mientras en el resto de Europa aun esperan las nevadas que deberían haber caído en diciembre, en Granada ya disfrutan del sol brillando en el manto blanco. Desde la misma Granada la montaña está a poco más de 40 minutos y desde su cumbre podrás divisar el Mediterráneo en los días claros. En cualquier caso recuerda siempre echar un vistazo a la previsión meteorológica y prepararte adecuadamente.
Para suavizar el invierno
Ronda, de norte a sur y de este a oeste. Seguro que habrás oído hablar de Ronda, uno de los pueblos más carismáticos del país. Situado entre los parques naturales de Sierra de las Nieves y de Grazalema nos regala buen tiempo, temperaturas suaves y algunas de las zonas más agradables en las que conducir. No es de extrañar que numerosas compañías de dos y cuatro ruedas elijan esta zona para presentaciones internacionales de sus vehículos. Además, el camino desde Ronda a la costa, de apenas 60 km, es una sucesión interminable de curvas entrelazadas. Y si te interesa, te contamos que el espectacular circuito de Ascari se encuentra a sólo 13 km al norte de allí.
Sierra de Monserrat y el Garraf. Barcelona es otro de los destinos favoritos de los europeos para huir del frío polar. Por sus alrededores se han criado algunos de los mejores pilotos y probado otras tantas máquinas. De hecho, nuestro amigo Javier Costas estuvo allí a los mandos del Toyota GT86. Monserrat, presidiendo la Ciudad Condal, tiene unas vistas impresionantes de la capital chapoteando en el Mediterráneo. A unos 70 km al sur nos encontramos con el Parque Natural de Garraf y la comarca que le da nombre.
Ruta de los grandes embalses en Extremadura. ¿Y la zona centro? No nos olvidamos de vosotros. El interior peninsular es, por suerte o por desgracia, mucho menos conocido que las agradables costas y montañas que lo enmarcan. Sin embargo, guarda secretos como la zona de los embalses en Extremadura. Entre Don Benito, Almadén y la Puebla de Don Rodrigo nos topamos con el Embalse de La Serena. Allí podremos ver, por ejemplo, una de las presas más grandes de Europa. Podemos seguir nuestro camino hacia el embalse de Orellana, el Cíjara y acabar en tierras del Parque Nacional de Cabañeros tras pasar Horcajo de los Montes. Aunque en Extremadura y Castilla La-Mancha suele lucir el sol, es necesario tomar precauciones y no olvidar que durante la noche la temperatura cae con regularidad por debajo de los cero grados.
Fotos | Motorpasión, MotoGeo