En la actualidad, y a pesar de la gran cantidad de avances realizados en los últimos años, la viabilidad de los coches voladores continúa siendo una utopía, ¿o no?
Parece que el futuro de los coches voladores está más cerca de lo que te puedes imaginar.
La era de los coches híbridos, eléctricos y autónomos en la que nos encontramos parece dar paso a una totalmente nueva: la de los voladores. Tanto es así, que de aquí al final de la década diferentes compañías están inmersas en proyectos, que se fraguarán en la comercialización de coches capaces de volar.
La industria cambiará la forma de entender el transporte, sin embargo habría que ver qué legislación se adaptaría a este tipo de vehículos desconocidos por todos, en cuanto a qué licencia se precisará para conducir este tipo de vehículos y por dónde podrán circular.
¿Qué proyectos se están llevando a cabo?
Hasta cinco proyectos se están llevando a cabo y más avanzados de lo que en un principio te puedas imaginar. Por ello, te señalamos en orden cronológico cuáles podrían ser los primeros en llegar.
AeroMobil 3.0, en tan sólo un año será una realidad
Desde 1989 la compañía eslovaca AeroMobil, tiene la intención de sacar al mercado un coche volador. De momento se encuentra en fase de pruebas el que será el cuarto prototipo, que parece haber tocado su fin, tanto que se espera que se comercialice en 2017.
Los empresarios Juraj Vaculik y Stegan Klein han sido quienes han hecho posible este sueño tecnológico de este biplaza desarrollado para que pueda circular por una carretera convencional a una velocidad máxima de 150 km/h, y en pocos segundos, con solo desplegar sus alas, volar a 200 km/h.
El coche volador de AeroMobil podría ser una realidad en 2017 y estaría enfocado a paises con escasas infraestructuras viarias
Desde AeroMobil aseguran que el aparato puede ser interesante para países con escasas infraestructuras viarias, ya que permitiría conectar con rapidez dos localidades alejadas evitando, de esta manera, un incómodo viaje por carreteras de tierra con firme irregular.
Este vehículo biplaza, que cuenta con alas plegables en fibra de carbono y un motor de gasolina Rotax 912, presenta una envergadura de 8,3 metros y una longitud de 6 metros.
El AeroMobil 3.0 puede alcanzar los 200 km/h en el aire y ha sido uno de los primeros prototipos en superar el test de vuelo, tras cubrir el 21 de octubre del pasado año en el aeródromo de Nitra (Eslovaquia) una distancia de 250 metros.
El Aeromobil cuenta con una autonomía de vuelo de 700 kilómetros y un consumo de 15 litros por hora
Cuenta además con una autonomía de vuelo de 700 kilómetros y un consumo de 15 litros por hora. Aunque este es uno de los prototipos más avanzados, para su lanzamiento en el mercado es preciso “tener una idea clara de la demanda”, según apuntan los creadores de la empresa eslovaca.
Entre sus ventajas destacan la capacidad para aterrizar en espacios no pavimentados. De hecho, este coche volador, a diferencia de una avioneta, puede aterrizar sin sufrir daños en zonas de tierra y hierba, que se encuentren en buen estado. Además, tanto para su despegue como para su aterrizaje, precisa poco más de 200 metros.
Terrafugia TF-X, autónomo y volador, ¿quién da más?
Quizás el más conocido en los últimos años es el de la empresa norteamericana Terrafugia, a través de su modelo TF-X, un coche volador que se espera que llegue al mercado en 2018.
Sus hélices son muy similares a las que utiliza un helicóptero, por lo que el Terrafugia TF-X despegaría y aterrizaría de manera similar a como lo haría un helicóptero, es decir de manera vertical, lo que supondría una gran ventaja en cuando a espacio.
El Terrafugia TF-X aterriza de manera similar a como lo hace un helicóptero, Además, como coche, presenta una conducción autónoma
Y eso no es todo, pues este vehículo volador será además autónomo, de manera que cuando aterrice, se podrá desplazar por sí solo.
Una vez en el cielo, el Terrafugia TF-X alcanza nada menos que 322 km/h para una autonomía de 800 kilómetros.
Lamentablemente para su conducción se precisará una licencia como piloto.
Además su precio tampoco será asequible para todo el mundo, pues alcanza los 261.000 dólares, unos 237.204 euros.
SkyDrive, previsto para producirlo en masa
Japón aprovechará los JJOO de Tokio 2020 para demostrar su manera de entender el transporte urbano y la tecnología con este coche eléctrico.
El SkyDrive cuenta con la gran ventaja que no precisa licencia para hacer volar este vehículo futurista
Al igual que el Terrafugia TF-X, el SkyDrive, que se encuentra desarrollando por el grupo japonés ‘Cart!vator’, aterrizará y despegará de manera vertical, aunque a diferencia de aquel no necesita licencia para conducir este coche futurista, que actualmente está siendo probado en una escuela de ingeniería propiedad de Toyota.
Con 3,5 metros de longitud y 1,3 de anchura, el SkyDrive se encuentra equipado con tres ruedas, un motor y cuatro rotores, que le permitirán volar a una distancia de 10 metros y circular a una velocidad máxima de 100 km/h.
El creador de Cart!vator, Tsubasa Nakamura, tiene preparados unos planes para este vehículo que van más allá de los Juegos Olímipcos de Tokio y es convertir este coche volador en un vehículo que se pueda producir en masa. La idea es crear “una nueva era en la que todo el mundo podrá volar libremente”, manifiesta Nakamura.
Toyota y su coche volador
Aunque si hay una firma que está revolucionando el sector del automóvil esa es Toyota, quien a su faceta de desarrollo y producción de híbridos y eléctricos, se suma otra, como es la de la creación de un coche volador. De momento, ha patentado un prototipo de este tipo de coche.
Aunque la marca nipona solicitó el registró del invento a finales de 2014, no ha sido hasta este año cuando la Oficina de Marcas y Patentes de los EEUU lo ha hecho público.
La propuesta de Toyota consiste en hacer un aerocoche que esconde alas en su fuselaje, cuya estructura se adapta a las necesidades de cada momento. De esta manera, se consigue la mejor aerodinámica, tanto si se viaja por aire como cuando aceptemos viajar por tierra.
Un conjunto de baterías son las encargadas de suministrar la alimentación al sistema de propulsión, conectado a una hélice ubicada en la parte trasera.
Los avances en aerodinámica de este coche volador, podrán implementarse en futuros coches de producción. Hasta el momento, Toyota no ha definido si en verdad llegará a producirlo o sólo se trata de un mero prototipo.
El coche volador de Larry Page
Larry Page, uno de los fundadores de Google, se encuentra desarrollando un vehículo aéreo individual, controlado por ordenador y con despliegue vertical
Larry Page, uno de los fundadores de Google, ha invertido nada más y nada menos que 100 millones de dólares, a título personal, en una ‘start up’ fundada en 2010 y denominada Zee.Aero, cuyo objetivo es el desarrollo de un coche volador, según afirman desde el portal económico Bloomberg.
La idea del proyecto Zee.Aero es desarrollar el primer vehículo aéreo individual, controlado por ordenador y con despegue en vertical.
Además de Zee.Aero, Larry Page invirtió en otra compañía, Kitty Hawk (el nombre de la colina desde la que los hermanos Wright volaron por primera vez), en la que trabajan doce ingenieros y cuya sede tiene lugar a pocos kilómetros de la primera, ubicada cerca de la sede de Google, en California. Su fundador es Sebastian Thrun, padrino de los coches sin conductor de Google.
La idea del multimillonario Larry es realizar el primer coche volador, capaz de sortear el tráfico y despegar desde el jardín de tu propia casa.
Las pruebas de los prototipos se han realizado en un aeropuerto cercano a Hollister, aunque de momento, ninguno de los prototipos se encuentra listo para volar, según señala Bloomberg. Al parecer, existen muchos problemas técnicos de seguridad y papeleo por comprender.
Fotos: Aeromobil, Terrafugia, Oficina de Patentes y Marcas de los EEUU, Zee.Aero