El Tesla Model S se está vendiendo razonablemente bien en Europa. Pero si desglosamos las ventas por países entonces nos encontramos una curiosa situación. Más de la mitad de todos los Model S vendidos en Europa se concentran en Noruega, Dinamarca y Holanda.
Es realmente curioso porque estos tres países no tienen mucha población y sus mercados locales de automóviles tampoco son especialmente potentes. Por lo tanto podríamos apuntillar que el coche eléctrico californiano está siendo un éxito ahí, pero que no está cumpliendo del todo las expectativas en el resto de países europeos.
Hemos de tener en cuenta que estos tres países siempre han representado un bastión de la movilidad eléctrica en el viejo continente. Casi todos los coches eléctricos del mercado suelen venderse bien, o mejor que en otros países al menos y esto es debido a los incentivos fiscales o a las ayudas que supone el hecho de comprar un coche eléctrico.
Vamos a poner unas cuantas cifras para contextualizar un poco. Se estima que en 2015 se vendieron 50.000 Tesla Model S. La mitad, unos 25.000 se vendieron en su mercado local: EE.UU. A Europa han venido a parar aproximadamente un tercio de todos los Model S: 16.000 unidades. Y el resto se han vendido en otros mercados como China, Japón etc...
De las 16.000 unidades europeas, Noruega encabeza la tabla con 4.039. Le sigue de cerca Dinamarca con 2.724 unidades y cierra el podio que comentábamos Holdanda con 1.821. Si buscamos los pesos pesados de la automoción en la UE, encontramos a Alemania en cuarta posición con 1.582 unidades y hay que remontarse hasta la novena posición para encontrar a Francia con 708 unidades.
No hemos de perder de vista el hecho de que el Tesla Model S es un coche de lujo, sólo asequible para un público objetivo muy reducido de personas. Juega en otra liga por asi decirlo, y aun así sorprende que sus cifras de ventas superen a las de otros modelos eléctricos pensados para las "masas".
