Hace unos días mi compañero Otero nos contaba como el Tesla Model S había superado las pruebas de choque americanas de la NHTSA con matrícula de honor. El coche sacó cinco estrellas de cinco posibles en todas las categorías, una hazaña que sólo consigue el 1% de los coches que prueba el organismo americano. Ahora el fabricante californiano saca pecho de sus resultados afirmando que el Tesla Model S ha obtenido la mejor puntuación de todos los coches probados por la NHTSA.
Según Tesla, el hecho de que su coche sea eléctrico ha condicionado en gran medida estos buenos resultados. El Tesla Model S es un "todo atrás": tracción trasera y motor cercano al eje trasero. El morro del coche está "hueco", que se utiliza como maletero secundario. Precisamente el hecho de no tener un gran bloque de acero indeformable en la parte frontal (el motor), le ha permitido a los ingenieros jugar con la carrocería aumentando las zonas de deformación para absorber energía en caso de choque frontal. Esta es una de las claves de la gran seguridad del coche.
El otro aspecto es la batería de litio situada en el piso del habitáculo. Esto baja el centro de gravedad del coche lo cual aumenta su estabilidad y dinamismo. Además, le aporta rigidez al conjunto. Sin embargo, donde realmente ha marcado la diferencia el Tesla Model S ha sido en el choque lateral contra un poste. Según Tesla han utilizado una técnica en el lateral del coche que consiste en anidar varias extrusiones de aluminio lo cual absorbe mejor la energía del impacto y la transmite al resto del vehículo. Como curiosidad, Tesla dice que esta técnica se utilizó en la fabricación de los módulos lunares del programa Apollo. Presumiendo de tecnología aeroespacial, vaya.
El techo del coche también parece estar hecho "a prueba de bombas". Según el fabricante, gracias a la robustez de su pilar B, el Tesla Model S podría aguantar encima el peso de otros cuatro Teslas Model S sin ceder. Esto es importante ya que así se tiene la certeza de que, en caso de vuelco, el techo no ocupara el sitio en el que están las cabezas de los ocupantes.
Desde luego me encanta la forma de hacer las cosas de Tesla, la calidad de su diseño y de su ingeniería. No vale con hacer las cosas para que funcionen, parece que las hagan pensando en que han de rozar la perfección. La calidad del producto final es intachable, eso si, esta calidad también hay que pagarla.
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